El candidato a la presidencia del Barcelona Joan Laporta, cuya alternativa ha ganado muchos enteros a medida que avanza la campaña, se ha convertido en las últimas horas en el centro de las críticas de sus oponentes, especialmente de un Lluís Bassat que ha decidido pasar definitivamente al ataque.

Bassat, que había prometido no entrar en personalismos y dedicarse sólo a explicar sus propuestas, denunció los supuestos planes de Laporta de buscar financiación en unos fondos de inversión británicos, algo que a su juicio sería "peligroso para el futuro del patrimonio del club".

Uno de los más estrechos colaboradores del publicista, Ricard Huguet, se quejó además ayer de que detrás de las críticas que han recibido de falta de independencia económica "no hay ningún fundamento. Y en todo caso hay mucho menos que el que yo tendría para decir, y que conste que no lo digo, que detrás de una determinada candidatura (la de Laporta) hay una multinacional que se dedica a comercializar ropa deportiva (Nike)".

Curiosamente, esas declaraciones de Huguet coincidieron en el tiempo con las explicaciones que tuvo que dar Laporta en su sede electoral a un periodista de Financial Times que insistía en vincular a Nike con la candidatura del abogado barcelonés. También se ha sugerido que que detrás de la operación del fichaje de David Beckham había un intento de la multinacional de hacerse con el control del Barcelona.