La Guardia Civil encontró en uno de los apartamentos madrileños un armatoste médico llamado ACP 215. Se trata de un sistema de almacenamiento y congelación de glóbulos rojos creado en Estados Unidos tras los atentados del 11-S por una compañía de Massachussets llamada Haemonetics.

El ACP 215 se creó para disponer de un banco de sangre en prevención de futuros ataques terroristas o catástrofes naturales y evitar posibles alarmas y necesidades de transfusiones masivas. Sólo tres hospitales españoles cuentan con un sistema tan moderno para almacenar la sangre, según fuentes del Ministerio de Sanidad. Su aplicación a los deportistas corruptos, que presuntamente usaban los médicos Fuentes y Batres, es sencilla.

Así funciona

Un cliente, por ejemplo, un ciclista profesional, se entrena en invierno sin pasar controles antidopaje y de EPO con lo que puede elevar su hematocrito (glóbulos rojos en la sangre) a un 58% o 59%. El límite legal para competir se sitúa por debajo del 50%. Antes de la competición, el ciclista se hace una transfusión sanguínea. Después se le administran sueros de glucosa para rebajar el hematocrito.

La sangre extraída, por su parte, va a la ACP 215, que separa sus componentes. Las plaquetas y el plasma se tiran. Los glóbulos rojos se almacenan congelados y esterilizados. Cuando el ciclista ya está en competición, necesita esos glóbulos rojos limpios para poder hacer más esfuerzo físico. De forma que uno de sus enviados recoge la bolsa, que puede estar fuera del arcón hasta 14 días sin perder sus propiedades, y se la lleva al deportista, que ya puede inyectarse su dosis.

Si el proceso se hace correctamente, en los glóbulos rojos no queda ni rastro de EPO ni productos dopantes, y el rendimiento del corredor aumenta, de forma que la trampa es indetectable. Fuentes de la investigación explicaron que este pudo ser el sistema usado por los ciclistas Roberto Heras, en la última Vuelta a España, y, anteriormente, por Tyler Hamilton y Santi Pérez, que sí fueron sancionados por dopaje. Los dos últimos usaron transfusiones de sangre de otras personas, por eso les pillaron. Y en el caso de Heras parece que su positivo puede ser causado por un mal uso de la lavadora, lo que pudo dejar restos de EPO en su sangre almacenada.

Material incautado

Además de esta sofisticada y, según todos los indicios, eficaz lavadora, importada de EEUU, los expertos en el lavado de sangre también utilizaban sueros y otros compuestos de glucosa, como el cloruro sódico, que sirve para diluir o adelgazar la sangre para conseguir dar menos tasas de hematocritos. La Guardia Civil también ha encontrado anabolizantes y bolsas de sangre en un arcón congelador, según pudo saber la revista Interviú .

La producción de este laboratorio tenía como principal destino el amplio pelotón del Giro. En ese sentido, el martes se supo que se ha estado vigilando la llegada de emisarios a los hoteles de varios de los equipos que, estos días, participan en la prueba italiana, que concluirá el domingo y que domina con gran autoridad el italiano Ivan Basso, del CSC.

Precisamente ayer Basso negó antes del comienzo de la decimoséptima etapa, que haya trabajado en alguna ocasión con médicos del entorno de Saiz, informa Efe.

Basso comentó que le sorprende lo que está escuchando sobre el director deportivo y que nada tiene que ver con su entorno. "Nos une una buen amistad, pero es demasiado atrevido, sin pruebas, decir que médicos de su entorno han llevado mi preparación".Además, reconoce que uno de los galenos de su confianza es Luigi Cecchini, pero que no tiene noticias de que colabore con Eufemiano Fuentes.

"Es mi compatriota. Buen galeno y excelente persona. Más no puedo decir de él",