Una vez más el alero Lebron James volvió a estar presente en otra barrida de los Cavaliers, que vencieron a los Toronto Raptors por 128-93, y que les permitió pasar a las finales de la conferencia Este por cuarta temporada consecutiva. Esta vez, Lebron no tuvo que marcarse su mejor partido para volver a ser el amo del encuentro y liderar a su equipo.

El público de Ohio en esta ocasión no vivió en primera personal las canastas imposibles de su alero fetiche, pero vieron un encuentro en el que el rival no pudo hacer nada. James aportó un doble-doble de 29 puntos, 11 asistencias y 8 rebotes en el que fue el décimo triunfo consecutivo de los Cavaliers ante los Raptors en partidos de playoffs. Kevin Love también quiso demostrar que tiene nivel para jugar en este equipo y logró 23 puntos ayudando siempre a James en la tarea atacante y defensiva.

TORONTO, SUPERADOS UNA VEZ MÁS

Los canadienses llegaban a las semifinales de la conferencia Este como favoritos por el papel realizado en la fase regular, pero enfrente tenía a su bestia negra. Los Raptors llegaban con la mejor marca durante la temporada regular, pero nada de lo que presentaron los Toronto en el campo, en cuanto a la estrategia técnica, sirvió para hacer frente al mejor jugador del mundo.

Se vieron superados en todo momento por Cleveland, eran incapaces de parar el vendaval de Lebron y desde el primer partido se le pusieron las cosas cuesta arriba. DeMar DeRozan fue de lo mejor en la serie en los Toronto, con un Ibaka discreto en la zona defensiva y más eficaz en ataque.

Por su parte, el base español José Manuel Calderón esta vez sí tuvo ocho minutos de acción con Cleveland y aportó 2 puntos como reserva. El extremeño disputará por primera vez en su carrera unas finales de conferencia. De esta manera, la eliminatoria ha quedado 4-0 favorable a Cleveland y ahora esperan al ganador de la eliminatoria entre los Celtics y Sixers, con 3-1 a favor de los Boston.

MCCONELL DA ESPERANZAS A LOS SIXERS

Llegar y besar el santo. Así se podría describir el papel de el base reserva T.J. McConnell, que en la madrugada del martes recibió la titularidad por sorpresa y la aprovechó para convertirse en la gran figura de los Philadelphia a los que aportó 19 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias que les ayudaron a ganar 103-92 a los Celtics y poner la eliminatoria 1-3 en contra. Una victoria de Boston les daría el pase matemáticamente.

El público estallaba de júbilo cada vez que McConnell lanzaba de tres o atacaba la canasta. Mientras Embiid y Simmons acabaron con sendos dobles-dobles que les permitió también ayudar al triunfo salvador de los Sixers. Philadelphia ahora se enfrenta a la dura tarea de remontar un 0-3 adverso, hecho que ningún equipo en la historia de la NBA ha logrado hacerlo.