Otra exhibición de Lebron James, esta vez con la ayuda del sorprendente Udonis Haslem, han puesto a los Miami Heat a una sola victoria de las finales de la NBA, donde ya esperan los San Antonio Spurs. Los Heat han derrotado esta madrugada a los Indiana Pacers (90-79) en el quinto partido de la serie (en Miami, con David Beckham viendo el duelo a pie de pista), y dominan por 3-2. El primer 'match-ball' tendrá lugar este sábado en Indianápolis.

El cuarto partido de la final del Este supuso un duro golpe para Lebron, que acabó desquiciado por la dureza de los Pacers y eliminado por faltas personales en los minutos decisivos del encuentro. El alero se ha resarcido con 30 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias, unas cifras notables labradas sobre todo en un tercer cuarto excelente, en el que ha anotado 16 puntos, tres más que todos sus rivales juntos en ese periodo. Ahí ha estado la clave del encuentro, que había llegado al descanso con ventaja visitante (40-44). "Irnos al descanso cuatro puntos abajo no ha sido el mejor signo para nosotros y lo único que dije a los compañeros es que teníamos que salir al campo a demostrar el talento que hay dentro de la plantilla", ha explicado el MVP de la temporada regular.

Ayuda inesperada

Lebron no ha estado solo. Pero esta vez su principal escudero no ha sido ninguno de los otros integrantes del 'Big Three' de la Florida, que han bajado notablemente su rendimiento en los 'play-off'. Chris Bosh se ha quedado en 7 puntos y Dwyane Wade, que lleva 11 partidos consecutivos por debajo de los 20 puntos (tras promeadiar 21,2 en la fase regular), se ha quedado en 10. En cambio, Udonis Haslem ha aportado 16 puntos con una serie de tiro casi perfecta (8 de 9). Mario Chalmers también ha puesto su granito de arena con 12 puntos y 6 asistencias.

Por los Pacers, Paul George ha vuelto a ser el mejor con 27 puntos y 11 asistencias. Roy Hibbert ha sumado 22 puntos y no muy lejos ha andado David West (17). El problema del equipo de Indianápolis es que el banquillo solo ha aportado 13 puntos. Demasiado poco ante un rival que tampoco es brillante en ese aspecto (15 puntos han anotado los reservas de Miami) pero que tiene al mejor jugador del mundo para hacer que no se note.

"Nos han roto por completo la defensa y no hemos sabido reaccionar. Ahora tenemos que pensar en el sexto partido y encontrar de nuevo la manera de hacer nuestro mejor juego", ha dicho Frank Vogel, entrenador de los Pacers. Un séptimo partido, el lunes en Miami, no es para nada descartable.