PLASENCIA: San Miguel (12), Poag (21), Cilla (3), Ward (15) y Mario García (13) --cinco inicial-- Gaby Domínguez (4), Barceló (9), Lledó (3), Balmón (9), Salsón (-) y Santana (-).

LEON: Barry (-), Bulfoni (6), Mills (13), Barnes (16) y Higgins (2) -cinco inicial-- Roccia (4), Panadero (19), Bernabé (3), Javier Vaca (2) y Martín Ferrer (5).

MARCADOR POR CUARTOS: 23-12, 44-24, 65-48 y 89-70.

ARBITROS: De Lucas y González Rico. Eliminado: Mills (min. 34).

INCIDENCIAS: Se estrenó la nueva mascota del Plasencia, ´Monfraguino´.

El Plasencia consumó con suficiencia su tercera victoria en Liga tras un encuentro en el que rayó la perfección en defensa y en el que el juego ofensivo redondeó un éxito que, además, se produjo ante el líder de la LEB, el León, a quien una vez más derrotó en la categoría, como viene siendo habitual.

Si bien cabe destacar el juego de conjunto placentino, hay que hacer un mención especial al recién incorporado Mark Poag que, con 21 puntos, fue el máximo anotador del encuentro, aunque también brilló en defensa, en la tónica general del equipo de Dani García.

Aparte de ello, el base Rodrigo San Miguel, en otra excelente actuación individual, fue el jugador más valorado del choque y en pocos minutos sacó de la pista a los dos bases rivales, Barry y Bernabé, siempre impotentes ante el talentoso jugador local.

RIVAL RENDIDO Mientras tanto, el León, a medida que las distancias iban en aumento, fue tirando la toalla ante la superioridad extremeña, que fue total en todos los aspectos del juego. Un dato avala esto: los locales consiguieron el mismo de rebotes defensivos que ofensivos (17) y una valoración total de 96 por 55 de su rival de ayer.

En el primer cuarto, el Plasencia empezó muy serio en defensa y muy metido en el partido también en ataque. Los rebotes ofensivos fueron claves para marcar diferencias muy pronto.

La dirección de Rodrigo San Miguel fue también determinante, ya que el base del Plasencia superó en todo momento primero a Barry y después a Juanjo Bernabé. Además, Mark Poag fue ampliamente ovacionado en el minuto 8 cuando se retiró con 5 puntos y varios rebotes y asistencias. En ese minuto el Plasencia ya superaba al líder por 23-12.

En el segundo cuarto, continuó la misma tónica, dejando anotar a su oponente sólo 24 puntos al final del primer tiempo, lo que da buena idea de su comportamiento defensivo.

SEGUNDA PARTE El segundo tiempo casi sobró en cuanto a la incertidumbre en el resultado. El cuadro placentino siguió con su superioridad ante su rival. El parcial del tercer cuarto estuvo igualado (21-24) y el León, sustentado en los triples de Panadero (cinco triples) y el trabajo ofensivo de Barnes.

En el último cuarto, lo más significativo fueron, por parte del Plasencia, las presencias de Salsón, que debutaba, y Santana. Ambos fueron muy aplaudidos por una hinchada que reconoció el trabajo general, aunque al final, faltando dos minutos, tributó la mejor ovación a la gran esperanza-realidad de los extremeños: Mark Poag.