DEPORTIVO: Aranzubia; Laure, Colotto, Lopo, Manuel Pablo; Rubén Pérez, Antonio Tomás; Saúl (Valerón; min.55), Juan Domínguez (Pablo Alvarez; min.79), Desmarets (Rindaroy; min.70); y Adrián.

BARCELONA: Valdés; Adriano, Pique, Puyol, Abidal; Mascherano, Iniesta (Thiago, 82), Keita; Pedro (Afellay; m.82), Messi, Villa (Bojan, 70).

GOLES: 0-1; min.26, Villa. 0-2; min.51, Messi. 0-3; min.80, Iniesta. 0-4; min.81, Pedro.

ARBITRO: Delgado Ferreiro (vasco). Amarilla a Rubén Pérez, por parte del Deportivo.

INCIDENCIAS: Luis Suárez hizo el saque de honor.

El Barça superó sin problemas la última prueba de la primera vuelta fuera de casa y goleó al Deportivo (0-4) en Riazor con una trabajada primera mitad, en la que se adelantó con un tanto de Villa, y una plácida segunda parte en la que exhibió una vez más su superioridad y clase.

Le frenó el Depor hasta el ecuador del primer periodo con todo el equipo en campo propio, agazapado en torno al área de Aranzubia, concentrado para destruir las combinaciones que intentaban los barceloneses, pero su oposición acabó cuando Villa anotó su gol 150 en Primera.

Guardiola dejó en el banquillo a Xavi, Busquets y Alves, pero el equipo apenas se resintió, superior al Deportivo, que bastante tenía con echar por tierra las jugadas que trenzaba el conjunto azulgrana, al que le faltaba precisión en el último pase ante la resistencia deportivista.

Con el único Balón de Oro que por el momento ha dado el fútbol español, Luis Suárez, en el palco de autoridades, uno de los candidatos a conquistarlo, Andrés Iniesta, animó el partido a los once minutos con un toque de espuela con el que se libró de los centrales del Deportivo sin llegar a probar a Aranzubia.

El equipo de Lotina, con un defensa menos de lo habitual para evitar meterse excesivamente atrás, salió de la cueva en contadas ocasiones, aunque tuvo la mejor oportunidad para abrir el marcador, casi en la única jugada que elaboró, pero Adrián no pudo rematar a portería en una acción en la que el Barcelona pidió fuera de juego.

EL INICIO El Barcelona, algo atascado en la línea de tres cuartos de ataque, se liberó con una combinación de los argentinos Mascherano y Messi y la asociación de este con Villa, que ganó la espalda a la zaga con un gran desmarque y batió a Aranzubia con un disparo cruzado que se coló entre las piernas del portero del Deportivo.

Era el minuto 26 de partido y el equipo coruñés tenía por delante una misión imposible para darle la vuelta al partido, con ausencias destacadas como las del mexicano Andrés Guardado e Iván Sánchez ´Riki´ y con jugadores fuera de su posición, como Manuel Pablo, que jugó a pierna cambiada en la banda izquierda. Perdonó el Barcelona el segundo antes del descanso con otra aparición de Villa y un contragolpe que Pedro no dirigió a la portería del Deportivo, que respiró cuando el árbitro anuló por fuera de juego un gol de Abidal.

Los coruñeses solo inquietaron antes del descanso con un disparo lejano de Rubén Pérez que no necesitó la intervención de Víctor Valdes y Riazor pidió la entrada de Juan Carlos Valerón, decisivo el miércoles en la Copa del Rey ante el Córdoba.

Lotina accedió al deseo de la grada a los diez minutos de la reanudación, pero para entonces el partido ya había quedado sentenciado por una pérdida de balón de Rubén Pérez, al que no le quedó más remedio que hacer falta en la frontal del área y brindarle así el tanto a Leo Messi.

Iniesta, antes de ser despedido con aplausos y muchos aficionados de pie, anotó el tercero tras recortar en la frontal del área y batir a Aranzubia con un disparo raso y ajustado al poste, y Pedro cerró la noche goleadora. Fue el brillante cierre a un día en el que el barcelonismo se vistió de luto con la muerte de su exjugador Angel Pedraza, con solamente 48 años, noticia anunciada a última hora.