Parece que de nuevo suben las temperaturas y quizás no tenga ya vuelta atrás, hasta dentro de algunos meses o el 40 de mayo, como dice el refrán, no en vano estamos ya prácticamente con el verano encima.

El calor y su mezcla con la humedad será uno de los principales enemigos en la maratón del Campeonato de Europa de Barcelona, tanto para las mujeres, el 31 de julio, como para los hombres, el 1 de agosto.

Por mi parte, como buen extremeño, las altas temperaturas no me asustan. Muchos años entrenando en nuestra tierra, en verano, hacen que ver un termómetro por encima de los 25º ó 30º no me asuste, aunque hay que reconocer que la humedad puede ser otro cantar.

Por supuesto hay que tomar sus precauciones, evitar ejercicio físico en las horas centrales del día, protegerse con gorras, protectores solares, etc, hidratarse bastante y refrescarse cuando se pueda, que los golpes de calor pueden ser mortales y con una insolación se pasa un mal rato.

Creo que en Extremadura esos temas los respetamos más por que por Madrid, desde hace ya nueve años que ando por allí, como se suelen exprimir mucho más los horarios es fácil ver, en pleno mes de julio, con 30 y pico grados de temperatura, quien sale a hacer ejercicio porque no tiene otra hora.

Muchas veces me preguntan, en estas épocas de calor, cual es el mejor horario para entrenar. Desde luego creo que lo mejor es cuanto más temprano posible o a últimas horas de la tarde en las cuales, aunque pueda haber ya altas temperaturas, por lo menos evitamos el efecto abrasivo del sol.

El 30 de junio se disputará en Cáceres el nacional de 10.000 metros en pista, allí estaré compitiendo, y seguro que las pruebas se disputarán bien tarde, a partir de las 9 o incluso las 10 de la noche.