Empieza la ‘operación salida’ en el Extremadura, que debe hacer hueco a los nuevos fichajes que configurarán su plantilla en Segunda División. El primero en dejar el club es Emmanuel Lomotey, que se incorporará al Córdoba para jugar en su filial.

El jugador ghanés ha hecho un buen trabajo, haciendo valer su polivalencia como mediocentro defensivo y central. Empezó con el filial en Tercera, pero en la recta final de la temporada fue muy utilizado por Juan Sabas en las alineaciones, aportando un gran componente físico a los partidos.

Sin embargo, todavía se trata de un futbolista en progresión a sus 20 años y de hecho su incorporación al Córdoba está pensada para que en principio actúe en el segundo equipo, que la próxima temporada dirigirá un personaje tan conocido en el fútbol extremeño y almendralejense como es Juan Marrero. El contrato que ha firmado Lomotey se extiende hasta el 2021.

¿Más salidas?

El Córdoba también ha lanzado sus redes en el Francisco de la Hera con otros tres miembros de la plantilla que consiguió el ascenso hace unos días en Cartagena, aunque esta vez sí para que estén con el primer equipo. Su interés se ha centrado en tres jugadores también fundamentales en el éxito: el centrocampista uruguayo Gio Zarfino, el extremo derecho Jairo Izquierdo --autor del gol que sería decisivo ante el Cartagena-- y el delantero Enric Gallego. De momento, sus respectivos casos todavía no se han resuelto. Están siendo días de frenética intensidad con vistas a posicionarse bien en el mercado.

Otra cuestión que se está afrontando ahora es ver qué jugadores interesa renovar. Todo hace indicar que la lista la encabezan dos de los hombres más carismáticos del vestuario: el defensa Aitor Fernández y el delantero Willy Ledesma. Ambos son los capitanes y podrían ser los primeros en firmar su continuidad apelando a sus méritos deportivos, pero también al valor simbólico que tienen ante la afición azulgrana.

Juan Sabas quiere tener el mayor número de jugadores disponibles el 16 de julio, cuando está previsto que arranque la pretemporada. Durante la preparación siempre puede haber altas y bajas, como es tradición, pero la idea es trabajar desde el inicio con un núcleo sólido que desde el principio pueda competir con garantías en una categoría tan exigente como la Segunda División.