Julen Lopetegui ha sido el elegido por Florentino Pérez para tomar el mando del Real Madrid tras la inesperada marcha de Zinedine Zidane. A tres días del estreno de La Roja en el Mundial de Rusia ante Portugal, la contratación del seleccionador español fue toda una bomba. Un terremoto, cuya onda sísmica se extendió desde Madrid hasta Krasnodar, donde la selección preparaba con tranquilidad esa cita, cuando el club blanco anunciaba en un comunicado oficial la contratación del técnico vasco.

A las cinco de la tarde, y a través de sus redes sociales, el Madrid designaba a Lopetegui como el heredero de Zizou, cogiendo por sorpresa incluso a la federación española. A esa misma hora, Lopetegui reunía a los jugadores en la academia de Krasnodar para comunicarles su fichaje por el conjunto madridista.

LAS PRISAS BLANCAS / El club blanco ejecutó la cláusula de rescisión de Lopetegui, fijada en dos millones de euros, para tener al entrenador que no encontraba. Más barato, por supuesto, que Mauricio Pochettino, que no tenía abierta puerta alguna para abandonar el Tottenham. De ahí, las prisas de Florentino, unas prisas que han dinamitado la tranquilidad justo antes del estreno en el Mundial, entrando, al mismo tiempo, en un territorio desconocido, erosionado el liderazgo del técnico.

No se conocen precedentes de situaciones así. Y menos antes de una Copa del Mundo, por lo que la federación emitió un escueto comunicado en el que confirmaba que «recibirá el pago de la cláusula de rescisión para que el actual seleccionador pueda firmar por el Real Madrid», además de solicitar «el máximo respeto para mantener la normalidad en la concentración de la selección».

DE VALLECAS AL BERNABÉU / Sin haber dirigido ni un solo partido en la Primera División española (estuvo en el banquillo de Vallecas en Segunda A y en el del Castilla en Segunda B) se asoma Lopetegui al Bernabéu, colocado en el centro del escenario mundial, después de unas semanas tumultuosas. No hace tanto, el pasado 22 de mayo, Lopetegui renovó como seleccionador hasta el 2020. Ni un mes ha pasado. Ahora, en cambio, firmará como nuevo entrenador del Madrid hasta el 2021, tras haberse alterado el sosegado paisaje que tenía la selección española. El terremoto no se acaba solo con el anuncio porque ahora falta ver la influencia que tendrá en el rendimiento de la selección, además de perturbar la convivencia. Entendía Lopetegui que, tal vez, sería su primera (y última) oportunidad de sentarse en el banquillo del Bernabéu.

Para empezar, a solo 48 horas del estreno mundialista contra Portugal comparecerán Lopetegui y Rubiales en la sala de prensa del estadio de Krasnodar para ponerle voz e imagen al terremoto que ha sacudido a la selección española, mientras el Madrid, una vez resuelto el urgente problema del entrenador, busca ahora reestructurar su plantilla. La excelente consideración que tienen jugadores de tanto peso como Sergio Ramos, capitán blanco y de España, e Isco sobre el técnico vasco ha sido un factor fundamental.

El Madrid ya tiene técnico y Rubiales, entretanto, se ve forzado a buscar al sucesor de Lopetegui. Michel se perfila como el gran candidato para tomar las riendas de la Roja una vez acabe el Mundial.