El piloto español de motociclismo Jorge Lorenzo ha confesado que su rivalidad con el catalán Dani Pedrosa se ha convertido en algo "personal" e incluso ha afirmado que hubo un momento que le divertía hablar mal de él. Así lo ha mantenido en una entrevista en la última edición de la revista italiana Motosprint, en la que también ha admitido que pensó en abandonar la competición en el 2008.

Mientras que su relación con su compañero de equipo Valentino Rossi, la califica como un choque "profesional", su confrontación con Pedrosa "ha superado la rivalidad deportiva", lo que ha atribuido a que los representantes de ambos al inicio de sus carreras, Alberto Puig y Dani Amatriain, respectivamente, "no se podían ni ver"."Si hubiera tenido en cuenta solo el aspecto profesional tendría que haber hablado bien de él [Pedrosa], en cambio me divertía hablar mal y organizaba un buen lío", ha comentado Lorenzo, quien ha añadido que en estas situaciones los periodistas pueden jugar un papel peligroso con sus preguntas.

"Si continúo así me mato"

Respecto a su debut en el 2008 y sus caídas ha señalado: "Tras la cuarta caída fea, en las pruebas de Barcelona, casi me rompo la cabeza [...]. No me acordaba de mi nombre ni de qué hacía. Cuando recuperé la conciencia de quién era y de lo que sucedía, decidí que iba a dejar de correr".El piloto ha afirmado que en aquel momento pensó: "Si continúo así me mato", aunque finalmente "ese pensamiento desapareció de golpe" cuando volvió a subirse a una moto.

No obstante, ha señalado que la experiencia le sirvió para cambiar el modo de afrontar las carreras y para entender "por qué se va rápido y, sobre todo, cuándo es el momento de tomárselo con más calma"."Se puede pensar en vencer un Mundial cuando se entiende que hay días en los que hay que aceptar el llegar segundo o tercero. De vez en cuando es necesario aceptar que otro puede vencer", ha añadido el piloto mallorquín.

"No era el momento de tomar riesgos"

Interpelado acerca de su decisión de permanecer en Yamaha otro año, a pesar de las buenas ofertas recibidas por otros equipos como Ducati, Lorenzo ha asegurado que lo hizo para proteger sus intereses y no para molestar a Rossi como muchos piensan."Algo me decía que debía permanecer en Yamaha, que era la cosa justa" y ha añadido: "Pensé que no era el momento de tomar riesgos e ir a Ducati".