El entrenador del Espanyol, Miguel Angel Lotina, firmó ayer la renovación por un año más con la entidad barcelonesa, tras la cual ha mostrado una doble satisfacción: por la confianza recibida de la directiva y la marcha de su equipo, en zona de Liga de Campeones. El entrenador españolista, que fue fichado esta temporada, suscribió una ampliación de su contrato hasta el 30 de junio del 2006, sin que exista ninguna cláusula de rescisión del compromiso.

Por encima de todo, el entrenador ha destacado que lo importante en una entidad es la "continuidad de la secretaría técnica", dirigida en el Espanyol por Cristóbal Parralo.

El entrenador españolista reveló que la idea de renovar fue tomando cuerpo cuando empezó a ver "cómo funcionaba el club" y también porque aseguró que se siente muy cómodo en el Espanyol.

"Me gusta el proyecto que está manejando el club. También me gusta el equipo que tengo, ya que tiene mucho margen de mejora. Mi familia se encuentra bien en Barcelona y me ven contento", destacó el entrenador españolista.

"Hay que ir dando talento a este equipo, pero sin hacer locuras. Todos estamos de acuerdo con que el equipo ha de mejorar, pero la idea es que el Espanyol, cuando yo me vaya, tenga más patrimonio y menos deudas. No voy a exigir el fichaje de jugadores si va a ser perjudicial para la entidad", señaló.

ENFADO Por otra parte, el presidente del Espanyol, Daniel Sánchez-Llibre, se quejó ayer del arbitraje del partido del miércoles en Mestalla, donde su equipo perdió 3-0 contra el Valencia, y además sufrió las expulsiones de Raúl Tamudo y Oscar Serrano.

"El Espanyol tiene que ir a por todas y lo que tenemos que hacer es salvar la situación y presentaremos alegaciones al comité de competición, con vídeo incluido. Lo que no entiendo es como este hombre puede ir pitando partidos por los estadios, porque lo único que está creando, y no es la primera vez, una crispación y es capaz de sacar la ilusión de 30.000 en cinco segundos", dijo el presidente.