Luis Enrique no cree en la maldición de Anoeta. Y si cree en ella, no quiere admitirlo en público ni desea que esa leyenda -una realidad, porque el Barça no gana en San Sebastián desde el 2007- enturbie la inminente visita a la Real Sociedad de este domingo. El entrenador del Barça opina qjue solo los motivos futbolísticos han impedido al Barça regresar triunfal de ese desplazamiento.

"El pasado no me interesa lo más mínimo, no tiene ninguna importancia en lo que sucederá mañana", entiende Luis Enrique,que considera más influyente -y afirma que será ási- el refuerzo anínimo del resultado inmediatamente anterior de su equipo: la victoria de Glasgow, con la clasificación para los octavos de final de la Champions.

"Lo que haya pasado en uno, dos tres, dieciocho o veinticuatro años no tiene nada que ver", ha remarcado en su intento de evitar las preguntas sobre el maleficio. Para negar la supuesta influencia de Anoeta en comparación con otros estadios, el entrenador del Barça ha sido concluyente: "No conozco ningún campo de Primera División que sea fácil".

MUY OFENSIVO Y MUY DEFENSIVO

Luis Enrique ha incidido en glosar las virtudes del cuadro blanquiazul, de quien ha destacado su capacidad de desplegarse como un equipo muy ofensivo y de su versatilidad para encerrarse como uno muy defensivo para impedir la circulación de balón del Barça. Eusebio Sacristán ya le ganó la partida del año anterior. La Real supo proteger el tempranero gol de Oyarzabal.

"Eusebio tiene nivel para ser entrenador del Barça en cualquier momento, por supuesto", ha asegurado Luis Enrique, recordando la trayectoria de quien fue uno de sus últimos técnicos (era ayudante de Rijkaard en la temporada 2003-04, cuando dejó el equipo azulgrana) y fue sucesor suyo al frente del filial.

Además de la influencia de Anoeta, a Luis Enrique le han preguntado por otros dos aspectos que pueden ejercer repercusión. El primero, sobre la 'Messidependencia'. "Solo faltaría que no notáramos la baja del mejor jugador del mundo", ha admitido, lo cual no rebate, ha añadido, que el equipo "tenga opciones y posibilidades" para sustituir a Messi con garantías. El segundo sería la presión que pueda ejercerel resultado del Real Madrid ante el Sporting de este sábado. Ninguna, a su juicio: "La única posibilidad de acercarnos es ganando nuestro partido".