ESPANYOL 2: Toni, Torricelli (Amaya, min.72), Lopo, Soldevilla, David García, Domoraud, Morales (Posse, min.83), Maxi Rodríguez, Roger (Alex, min.68), Milosevic y Tamudo.
REAL MADRID 2: Casillas, Michel Salgado, Hierro, Helguera (Morientes, min.90), Roberto Carlos, Flavio, Cambiasso (Solari, min.60) (McManaman, min.68), Zidane, Raúl, Figo y Ronaldo.
GOLES: 1-0, min.40: Roger. 2-0, min.45: Tamudo. 2-1, min.59: Roberto Carlos. 2-2, min.75: Figo.
ARBITRO: Rodríguez Santiago (Castellano-Leonés). Expulsó por dos tarjetas a Alex (m. 88).
El Real Madrid, aunque capaz de remontar el 2-0 con el que se fue al descanso, cedió en esta jornada un nuevo empate, tercero consecutivo en la Liga, que permite al Espanyol, su rival de esta semana, salir de los puestos de descenso.
La táctica de Clemente funcionó, porque el Espanyol aguantó lo suficiente como para que el Madrid perdiese empuje, aunque sus jugadores daban siempre la impresión de poder marcar en cualquier acción.
Tras dedicarse únicamente a frenar al rival en los primeros 25 minutos, el conjunto catalán comenzó a creer en sus posibilidades y en que podía hacer algo más que encerrarse atrás.
A diez minutos para el final de la primera parte, el juego madridista recuperó el nivel de inicios de partido en busca de un tanto que lo pusiese en ventaja al descanso, pero Ronaldo fue incapaz de superar al guardameta Toni en un uno contra uno y el Espanyol castigó duramente el fallo del delantero brasileño.
Roger, en el minuto 40, se hizo con un balón en la frontal del
área y, con un tiro raso y colocado, superó la estirada de Iker Casillas para adelantar a su equipo en el marcador en un momento de los denominados psicológicos.
Pero lo peor para los madridistas estaba por llegar, porque, con el tiempo cumplido, Maxi Rodríguez ejecutó una falta en forma de centro al interior del área, que despejó Casillas, pero el balón le cayó a Roger que disparó fuerte y el rechace lo aprovechó Tamudo para marcar el segundo.
SEGUNDA PARTE
En el primer minuto, Maxi estuvo a punto de sentenciar con un nuevo gol, pero su disparo lo despejaron entre el guardameta del Real Madrid y el poste izquierdo.
El Real Madrid se dedicó a partir de entonces a deambular sin encontrar el ritmo de juego adecuado a sus intereses hasta que, a punto de cumplirse el primer cuarto de hora, Roberto Carlos aprovechó un rechace en la frontal para demostrar de lo que es capaz su potencia de disparo.
Surgió entonces la figura de Luis Figo para evitar que los últimos resultados negativos alcanzasen visos de crisis y asumió la responsabilidad con una falta que convirtió en el empate.
El partido se convirtió en un ´correcalles´ del que cualquiera podía sacar provecho.
