ATHLETIC: Lafuente, Lacruz, Luis Prieto, Amorebieta, Dañobeitia (min. 71, Guerrero), Ustaritz (min. 46, Murillo), Iraola, Ustaritz, Orbaiz, Gurpegui, Aduriz, Urzaiz (min. 60, Llorente).
REAL MADRID: Iker Casillas, Michel Salgado, Woodgate, Sergio Ramos, Roberto Carlos, Cicinho (min. 87, Raúl Bravo), Guti (min. 89, Baptista), Zidane, Pablo García (min. 24, Gravesen), Robinho, Ronaldinho.
GOLES: 0-1: min. 4, Robinho. 0-2: min. 92, Raúl Bravo.
ARBITRO: Ramírez Domínguez (andaluz). Amonestó a Amorebieta, Guerrero y Murillo y a Woodgate, Gravesen, Salgado y Sergio Ramos.
El Real Madrid prolongó en Bilbao su racha de victorias ligueras y cogió impulso para intentar la difícil misión de remontar el martes la eliminatoria de la Copa del Rey frente al Zaragoza. Mientras, con esta derrota el Athletic vuelve a ver complicada su situación en la zona baja de la clasificación de Primera.
El partido se inició de forma inmejorable para el conjunto madridista. Zidane conectó un excelente pase en profundidad que dejó solo a Robinho. El brasileño mantuvo la tranquilidad ante la salida dubitativa de Lafuente y marcó el 0-1.
Era apenas el quinto minuto y el Athletic se quedó helado, como si toda la estrategia de Javier Clemente se hubiese desmoronado. Sólo balones largos ponían un poco de peligro sobre la meta de Iker Casillas.
El Madrid, mucho más cómodo sobre el campo y evidentemente menos presionado que en otras visitas a San Mamés, pudo incluso marcar el 0-2 en una acción similar a la del primer tanto. Sin embargo, Ronaldo controló mal y la ocasión se volatilizó (min. 13).
Casi a la media hora llegó un contratiempo para el equipo de López Caro. Pablo García se lesionó tras un encontronazo con Ismael Urzaiz y tuvo que ser sustituido por Thomas Gravesen. Los blancos parecieron perder entonces el control del balón y permitieron acercamientos más descarados del Athletic.
El Madrid se limitó entonces a dejar hacer a su rival y a esperar algún contragolpe que sentenciase. Pudo ocurrir en el minuto 35, cuando Lafuente despejó con la pierna un disparo de Robinho tras una dejada de Ronaldo. Antes del descanso, Urzaiz puso en apuros a Casillas, que despejó a saque de esquina.
SIN MORDIENTE Clemente introdujo primero a Murillo y luego a Llorente con la intención de darle otro aire a su equipo. Sin embargo, fue Aduriz el que pudo igualar la contienda en cuando no acertó a rematar solo dentro del área un balón aparentemente claro (min. 50).
En la media hora final los dos conjuntos evidenciaron cansancio y el partido se convirtió en un correcalles , con constantes acercamientos a las dos porterías, aunque sin verdadero peligro. A destacar un contragolpe en el que Cicinho, digno sustituto de David Beckham anoche, no supo culminar.
El Athletic, desesperado por lograr al menos un punto que aliviase su situación, no vio fruto a sus constantes balones bombeados. Ya en el descuento, Raúl Bravo, que acababa de salir para perder tiempo, sentenció en un contragolpe.
