Juan Ramón López Caro, técnico del Madrid, quiere seguir la racha triunfal ante un Espanyol que lleva diez años sin vencer en el Bernabéu y, tras convertir a su equipo en el más potente de Europa por sus resultados de enero, reservará a Sergio Ramos y Guti pensando en la semifinal de Copa contra el Zaragoza.

Regresa el poder goleador de Ronaldo. Y junto a él entran en la convocatoria como novedades Míchel Salgado y Pablo García. La enfermería se vacía y los problemas para diseñar un once aumentan. Tanto, que López Caro, tendrá en mente el partido de ida de la semifinal de Copa del próximo miércoles ante el Zaragoza en La Romareda y reservará a dos jugadores indiscutibles en su esquema: Sergio Ramos y Guti.

Ramos, el jugador de campo que más minutos acumula en el Real Madrid esta temporada, es la gran ausencia tras sufrir esta semana la extracción de las cuatro muelas del juicio. Su puesto lo ocupará el inglés Jonathan Woodgate, con una defensa que no ofrecerá más cambios ya que el técnico piensa utilizar a Salgado en La Romareda en un encuentro más duro defensivamente en el que sacrificará a Cicinho. Si López Caro confirma el descanso a Guti, que arrastra molestias en un tobillo, junto a Gravesen se ubicará Zidane para construir y la entrada de Ronaldo retrasará a Baptista.

CONTINUIDAD Por su parte, el Espanyol pretende poner fin a la buena racha del conjunto madrileño y, de paso, continuar con su remontada en la clasificación que le ha permitido instalarse en la parte cómoda. La victoria ante el Málaga alejó un poco más el miedo del descenso y los tres puntos permitieron al equipo situarse en una situación cómoda en la tabla. Posiblemente, ésta ha sido una de las semanas más plácidas de trabajo en el terreno deportivo de los últimos meses e incluso la plantilla disfrutó de dos días de fiesta al no tener que jugar entre semana, por primera vez, el último mes.

Lotina ha dispuesto de tiempo para preparar el encuentro y ha avisado que no piensa renunciar ni a su filosofía de juego ni a sus ideas, aunque ha dejado entrever que un sistema demasiado ofensivo tampoco parece la mejor solución para enfrentarse a un rival con tantos jugadores decisivos como el Madrid.

El Espanyol salió goleado del Santiago Bernabéu la pasada temporada pese a disponer de claras oportunidades para conseguir un resultado mejor, especialmente en la primera parte, en la que fueron mejores.