Villarreal - 1: Diego López, Mario, Marchena, Musacchio, Capdevila; Senna (Nilmar, m.72), Bruno, Cani (Cazorla, m.67), Borja; Rossi y Marco Ruben (Cicinho, m.85).

Real Madrid - 3: Casillas, Arbeloa, Sergio Ramos, Carvalho, Marcelo; Pepe, Granero (Albiol, m.86), Xabi Alonso, Kaká (Ozil, m.69); Benzema (Di María, m.62) y Ronaldo.

Goles: 0-1, m.17 Marcelo. 0-2, m.22 Cristiano Ronaldo. 1-2, m.51 Cani. 1-3, m.92+ Cristiano Ronaldo.

Arbitro: Undiano Mallenco (C. Navarro). Amonestó por el Villarreal a Borja Valero, Marchena, Cani, Bruno y Capdevila, por el Real Madrid a Alonso.

Incidencias: Partido disputado en el estadio de El Madrigal ante 22.000 espectadores.

El 1-3 del marcador final del Villarreal-Real Madrid no reflejó lo que pasó sobre el terreno de juego, en un partido que estuvo más cerca del empate, tras una gran segunda parte del Villarreal que no mereció tanto castigo. El conjunto de Mourinho completa su notable racha a domicilio que inició ante Valencia (3-6) y siguió ante el Sevilla (2-6).

Salió mucho más metido en el partido el Real Madrid, ante un Villarreal muy retrasado en su campo, y suya fue la posesión desde los primeros compases del choque. Con un Cristiano Ronaldo muy activo el conjunto madrileño buscó el gol desde el inicio.

Por el bando local, Rossi acaparó todo el peso ofensivo de los suyos y gozó de la primera gran ocasión de su equipo en un mano a mano escorado con Casillas que ganó el italiano pero su centro para que Marco Ruben marcara a placer fue interceptado a última hora por Pepe, quien evitó el gol.

Del posible 1-0 se pasó al 0-1 en menos de un minuto, tras una buena contra del Madrid en la que Kaká, el mejor de su equipo en la primera parte, habilitó perfectamente a Marcelo, quien de vaselina batió a Diego López. La puntilla la puso Cristiano Ronaldo, apenas cinco minutos después, al transformar un libre directo.

REACCION INUTIL Tras el 0-2, la decoración varió. El Madrid cedió el balón al Villarreal y buscó el contragolpe como argumento ofensivo para buscar un tercer tanto que cerrara el partido, aunque se llegó al descanso sin más sobresaltos porque éstos se los reservó el cuadro local para la reanudación.

El Villarreal salió del vestuario transformado y puso contra las cuerdas al Real Madrid. A los cinco minutos Cani recortó diferencias y apenas un minuto después el jugador aragonés sirvió un balón perfecto a Marco Ruben, pero el argentino estuvo lento y Ramos le impidió rematar.

El partido se fue calentando, sobre todo por parte de los jugadores del Villarreal con el arbitraje de Undiano Mallenco y de su asistente Fermín Martínez, quien se encaró con varios jugadores locales y fue empujado por Cani.

Ante el colapso de juego en el que había entrado su equipo, Mourinho dio entrada a Di María y Ozil para tratar de reactivarlo, mientras que Garrido echaba más madera al fuego con Nilmar, su tercer delantero sobre el terreno de juego, para tratar de buscar el empate.

Aunque los contragolpes madridistas desprendían más peligro con la entrada de estos jugadores, el partido siguió siendo del Villarreal que buscaba con ahínco la meta de Casillas pero fue Cristiano Ronaldo quien en el tiempo de prolongación vio puerta, de nuevo en un libre directo, cerró el partido y logró su récord.