Málaga y Real Madrid no son originales, en la última jornada del año, y ambos aspiran a cerrar el año con una victoria y tres puntos que significarían un ascenso en la clasificación y, sobre todo, tener unas vacaciones tranquilas. El encuentro será a partir de las 20.00 horas (PPV).

El Real Madrid espera conseguir el objetivo liguero que se impuso tras conseguir la Copa Intercontinental: conseguir tres victorias en los tres últimos partidos de Liga.

El equipo logró la victoria en Mallorca (1-5) y después en el Bernabéu ante el Recreativo (4-2), aunque con más problemas de los inicialmente previstos. Ahora en Málaga, quieren cerrar el ciclo y marcharse unos días de vacaciones con la satisfacción de haber hecho los deberes.

Todos los jugadores han comentado que, en el parón invernal de la Liga de Campeones, el equipo debe centrarse en la Liga y subir puestos en la clasificación, y no ganar en La Rosaleda seria un importante frenazo en sus aspiraciones.

Vicente del Bosque cuenta con las bajas de Fernando Hierro y Claude Makelele, aunque la recuperación de Roberto Carlos y Michel Salgado le ha quitado un quebradero de cabeza considerable.

Flavio Conceicao también se ha recuperado de un problema de sobrecarga en los adductores y de hecho será el pivote del equipo, toda vez que Cambiasso también se ha quedado fuera de la convocatoria por un problema de "tendinitis en el tendón rotuliano de la rodilla derecha".

Del Bosque va a presentar "algunos matices" en el esquema del equipo, aunque "la sustancia es prácticamente la misma". Zidane estará inicialmente junto a Flavio, aunque más adelantado, con Figo en la banda derecha y Solari en la izquierda, la verdadera novedad.

El dibujo táctico del centro del campo tendrá cierta tendencia al rombo, sobre todo a la hora de atacar, aunque en misiones defensivas, Solari tendrá que multiplicarse en el centro del campo.

Del Bosque ha convocado a veinte jugadores para viajar a Málaga, "para cubrirnos ante cualquier contingencia, porque tenemos jugadores con sobrecargas", entre los que se encuentra el central del filial, Rubén. El Málaga necesita mañana el triunfo ante el Real Madrid, tras cinco partidos sin ganar, que le han situado a solamente cuatro puntos de las posiciones de descenso, aspecto que preocupa bastante a los jugadores del equipo blanquiazul.

A POR LA SORPRESA

El conjunto malagueño intentará dar la sorpresa frente al actual Campeón del Mundo y de Europa, principal favorito por plantilla y presupuesto, aunque el Real Madrid siempre ha sufrido en La Rosaleda para conseguir un resultado positivo.

El Málaga lo va a tener difícil ya que está pasando por una crisis de resultados que le ha llevado a empatar tres encuentros contra el Valladolid (0-0), Alavés (0-0) y Villarreal (1-1) y a perder ante el Racing (1-0) y Deportivo (1-0).

La situación se torna más compleja si tenemos en cuenta que en estos cinco partidos solamente se marcó un gol, una cifra irrisoria para un equipo que es de los más goleadores de Primera División.

Los jugadores y aficionados apelan al orgullo y a la casta demostrada en la UEFA, sobre todo en el último encuentro frente al Leeds United (1-2), para doblegar al Real Madrid.