Vicente del Bosque, entrenador del Real Madrid, mantiene su apuesta de que sean los habituales suplentes los que "defiendan la suerte del equipo en la competición copera", mientras que Gregorio Manzano, técnico del Mallorca, confía en que el partido de vuelta pueda ser decisivo. Del Bosque tendrá que introducir algún cambio en la alineación habitual de la Copa, por pequeñas enfermedades de alguno de sus jugadores, pero mantiene su apuesta con los menos habituales.

Hasta tres jugadores sufren faringoamigdalitis aguda: Guti, Cambiasso y Morientes. Los tres tenían serias opciones de jugar frente al Mallorca, pero no han podido entrar en la convocatoria del técnico.

Para sustituirles, Roberto Carlos jugará en el lateral izquierdo y Raúl Bravo jugará también en la banda izquierda, pero en posiciones más adelantadas, mientras que Flavio ocupará el doble pivote, por delante de la defensa, junto a Celades.

Los demás serán los mismos que eliminaron al Terrassa. En el banquillo, el técnico madridista hace rotaciones, en la particular guardia pretoriana que se reserva por si las cosas no van demasiado bien, y cuenta con Makelele, Hierro, Raúl y Ronaldo.

MIRANDO AL FUTURO

El Real Mallorca afrontará el partido del Santiago Bernabéu, con el objetivo de mantener intactas sus opciones para el encuentro de vuelta que se celebrará la próxima semana en el estadio Son Moix.

Por ello, tanto el técnico, Gregorio Manzano, como sus jugadores, han insistido a lo largo de esta semana que deben jugar "con mucha cabeza" en el estadio madridista y sin perder, en ningún momento, la referencia el partido de vuelta.

"El Madrid no se come a nadie", declaró el camerunés Samuel Etoo, exmadridista a quien el regreso siempre le supone motivación especial.