«Quizá porque los dos nos fuimos a estudiar muy jóvenes a Estados Unidos y allí o espabilas…». El pívot Jorge Alain Bilbao Torrontegui, ‘Jorge Bilbao’ (Bilbao, 27 de junio de 1995) justifica así su indisimulada madurez, puesta de manifiesto en cada frase que pronuncia, en tono grave, sin balbuceos y entendible para todos. La suya y la no menos contrastada frescura del base Aitor Zubizarreta Aranbarri (Azpeitia, 6 de marzo de 1995). Con ellos, Jorge Azcona, gerente del centro deportivo El Perú Cáceres Wellness y también vasco, es fácil intercambiar impresiones sobre su club, el Cáceres Patrimonio. El presidente, José Manuel Sánchez, lo corroboró habló especialmente bien del espíritu de ambos y les pidió que colaborasen en poder lograr su objetivo: «estar en la zona media de la tabla sería lo ideal», expresó.

El discurso es nítido en los dos jugadores, que dicen anteponer el colectivo a sus propios números. «Los galardones individuales son secundarios. Lo que importa es disfrutar y ganar los máximos partidos posibles», añade Bilbao a modo de mensaje. «Yo lo que quiero es crecer como jugador y que también crezca el equipo», apuntó.

Están felices ambos, que agradecen la condición del Cáceres de club «familiar y que está siempre pendiente de nosotros». La frase es literal y solo con matices nada trascendentes es la misma en ambos. «Somos un buen grupo. Hemos tenido altibajos. Tenemos que disfrutar del baloncesto y defender y atacar lo mejor posible», dijo de él Zubizarreta, base procedente del Palencia que quiere consolidarse en la LEB Oro con el trabajo que le ha encomendado su entrenador, Roberto Blanco. «Me ha pedido defender y contagiar a los cuatro jugadores que estén conmigo en la pista», añadió. «Frescura y energía». Eso es lo que se le solicita e intentar «cambiar el ritmo» de los partidos como complemento al veterano compañero de puesto, Ricardo Uriz.

«Somos un club muy cercano. Esperemos que estén felices entre nosotros», transmitió el presidente del Cáceres, que agradeció también la renovación del acuerdo con El Perú, cuyo gerente adelantó que como novedad los jugadores iban a ser sometidos a una prueba para medir su fortaleza y salud cardiaca a través de la denominada Beat Grit Cardio, nuevo servicio del centro deportivo cacereño.