Las semifinales de la Liga de Campeones es un sueño al que no renuncia el Málaga tras el 0-0 de la pasada semana en la ida de los cuartos disputado en La Rosaleda ante un Borussia Dortmund que confía en su poderío y en su afición para superar la eliminatoria.

El Málaga llega a Dortmund consciente del poderío del rival, pero también vivo tras el juego desarrollado por el Borussia en La Rosaleda, donde dispuso de ocasiones muy claras para haber ganado y donde el meta Willy Caballero fue la figura de la formación de Pellegrini.

Algunos de los titulares de hoy estarán descansados, como el propio Caballero, el defensa argentino Demichelis, los centrocampistas Joaquín y el francés Toulalan o los delanteros Isco y el argentino Saviola, todos sacrificados el pasado sábado en el estadio de Anoeta para que estén ante el Borussia en plenas condiciones.

Pellegrini, que viajó el sábado a su país para asistir al sepelio de su padre, no pudo trasladarse ayer con la expedición malagueña a Dortmund aunque ya tenía planificado la preparación de este partido con antelación.

El Málaga cuenta con las bajas del centrocampista portugués Eliseu, quien está lesionado, y con la del chileno Pedro Morales, otro jugador de la zona media que en su caso no pude jugar al no estar inscrito.

Otro centrocampista, el chileno Manuel Iturra, no podrá jugar por sanción y su sustituto puede ser Ignacio Camacho, mientras que el sitio en la defensa del brasileño Weligton, también sancionado, lo ocuparía el uruguayo Diego Lugano.

El Dortmund, por su parte, llega al partido contra el Málaga tras haber logrado una clara victoria ante el Augsburgo en la Bundesliga (4-2) aunque ese compromiso no da muchas pistas sobre el duelo ante el equipo andaluz puesto que hubo muchas rotaciones.