Diego Armando Maradona deberá ser operado de un cóagulo en el cerebro, según fuentes vinculadas al propio excapitán de la selección argentina. Se desconocen los detalles de la intervención. La noticia generó de nuevo una ola de inquietud por el estado de salud del mito del fútbol.

Maradona había sufrido un golpe en su casa como consecuencia de una caída. En principio no se le dio importancia. En el marco de su nueva internación del lunes por la noche se le descubrió un hematoma en el lado izquierdo de la cabeza.

"Es una cirugía de rutina. No cambió el panorama, Diego sigue igual, sigue con la misma condición clínica, pero con una causa más concreta", explicó el doctor Leopoldo Luque, que será quien lleve a cabo la intervención. El diagnóstico es el mismo que recibió la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y por el que tuvo también que someterse a una operación en 2014.

El hematoma subdural suele generalmente estar ocasionado por una lesión en la cabeza lo suficientemente fuerte como para reventar vasos sanguíneos, lo que puede provocar una presión en el cerebro debido a la sangre acumulada. La edad, los anticoagulantes y el abuso del alcohol, que podría ser el caso de Maradona, pueden aumentar el riesgo.

Buena noche

"Él está mucho mejor que ayer y con muchas ganas de irse", había dicho por la mañana Leopoldo Luque, su médico personal. Su internación en un sanatorio de la ciudad bonaerense de La Plata había obedecido a un cuadro depresivo y deshidratado. El hallazgo del hematoma y la necesidad de una cirugía han cambiado las expectativas sobre su situación personal.

Cuando Maradona entró el centro hospitalario, Luque trató de llevar la calma. "La noche la pasó bien y estuvimos bromeando. Yo quiero que se quede un día más. Pero él tiene autonomía y se quiere ir. Si está consciente, él lo puede decidir". No obstante recordó que Maradona "está anémico y todavía lo noto deshidratado, así que hay que corregirle eso". El especialista advirtió de que el tratamiento llevará un tiempo: "Es a largo plazo y que se hará de forma ambulatoria. Pero puede trabajar cuando quiera".

Semana complicada

Pocos días después de que se celebrara su cumpleaños 60, el excapitán del combinado argentino volvió a estar en el centro de rumores inquietantes. Se temió lo peor hasta que Luque explicó las razones de su llegada al sanatorio. "No está en terapia intensiva ni en una sala cerrada. Tuvo una semana complicada en lo emocional; mucha presión y eso generó un bajón anímico. Lo veíamos con una actitud diferente".

Luque descartó en la noche del lunes que el entrenador de Gimnasia y Esgrima de la Plata hubiera tenido un ACV. "También es mentira que haya tenido una recaída en un cuadro de adicciones". El exastro, añadió, "está limpio de cocaína, completamente, pero por momentos tiene excesos con el alcohol y por momentos no. Esta cuarentena y los problemas familiares son terribles para él".

Ansiolíticos recetados

No obstante reconoció haberlo visto "desganado, más enojado y a veces no me quería recibir". Dijo que el propio Maradona accedió a ir a la clínica después de que le explicara la importancia de enfrentar los problemas que surgieron en las últimas horas.

"Diego está bien; si quiere se para y se va. Pero la idea es dejarlo allí hasta que encuentre el estado óptimo". Todo se corroborará con estudios de laboratorio. Luque llamó a no prestar atención a "especulaciones que no valen la pena".

Desde hace tiempo, Maradona ingiere ansiolíticos recetados. "Son tratamientos que nosotros continuamos porque algunos medicamentos no se pueden sacar así nomás. El cuerpo desarrolla tolerancia y retirarlos de forma drástica puede ocasionar problemas".

Preocupación general

"Hay que cuidar a Maradona", tituló el diario deportivo Olé. De acuerdo con la publicación, el exjugador "está decaído, sin ganas de comer, de hablar. Extraña mucho a sus padres (ambos fallecidos años atrás). El cumpleaños fue una fecha que le removió muchas cosas. Tiene roto el corazón". Su hija Gianinna señaló con una dosis de piedad: "Me parte el alma verlo así". Dalma, la hermana mayor, expresó su deseo de que "esté bien".

Su entrada al sanatorio bonaerense se decidió pocas horas después del breve homenaje que tuvo lugar en el estadio de Gimnasia y Esgrima antes del partido que su equipo disputó con Patronato de Paraná por la primera fecha de la Copa de la Liga Profesional. Diego exhibió dificultades para caminar y debió ser acompañado por dos asistentes. Tras conversar con dirigentes de la Federación de fútbol, se sentó en el sillón que tiene al lado del banco de suplentes. Antes de que concluyera el primer tiempo se retiró a su domicilio.

Días antes de su cumpleaños, Maradona tuvo que ser aislado por haber tenido contacto estrecho con una persona sospechosa de haber contraido el covid-19.