Puntazo de oro del Extremadura, sufriendo mucho sobre el Carlos Tartiere, pero también teniendo la mayor eficacia posible ante el Oviedo (1-1). Notable en el histórico regreso de la comunidad autónoma al ámbito la Liga de Fútbol Profesional después de 16 años.

No fue sencillo. Sobre la alineación, llamó sobre todo el debut del central Marcelo Djalo, uno de los últimos en llegar, y también el del almendralejense Samu Manchón, uno de los que se estrenaba en Segunda. También fueron titulares Borja Granero y Pomares.

Juan Sabas solo contó con cinco jugadores de banquillo porque las fichas de Diego Capel y Nico Delmonte no llegaron a tiempo para ser tramitadas. Fue un contratiempo.

El Extremadura salió con un claro 4-2-3-1, el esquema habitual del técnico madrileño. Apostó por la vuelta de Kike Márquez después de su recuperación ‘express’ de su problema de clavícula. Quizás las ausencias obligaron a ello.

Los quince primeros minutos presentaron a un Oviedo en plan ‘volcán’, con muchos centros laterales, especialmente desde la banda derecha de Johannesson y desde la izquierda de Saúl Berjón y Mossa. Este último metió un balón por dentro, filtrado al corazón del área que fue controlado a la perfección por Toché, que también resolvió de maravilla en lo que era el 1-0.

Minuto 10 y el huracán ovetense no paró ahí. El propio Toché recogió otro pase que le dejó solo ante Manu García, pero su intento de vaselina se marchó fuera por poco (min. 18).

Los locales levantaron el pie del acelerador poco después, lo que aprovechó un poco el Extremadura para hacerse con el control del partido, lo que se tradujo más en aproximaciones que en ocasiones en sí.

A un envío lateral de Kike Márquez no llegaron ni Djalo ni Pardo por muy poco. Alex Díez también obligó a Alfonso Herrero a emplearse en un centro raso. Y después, una jugada larga entre Kike Márquez y Samu Manchón que acabó con un disparo desviado del primero.

Fueron las tres principales opciones del Extremadura, a lo que reaccionó el Oviedo cogiendo de nuevo el timón en los diez últimos minutos de la primera parte. La banda izquierda azulgrana sufrió, con Samu Manchón y Pomares teniendo mucho trabajo con Boateng --ex del Extremadura-- y Johannesson.

LA GRAN ALEGRÍA / La segunda parte arrancó con un Oviedo de nuevo volcado hacia la portería de quien acabaría siendo uno de los hombres del partido, Manu García. Su primera gran intervención fue en un disparo seco, muy ajustado, de Boateng.

Seguidamente, los asturianos, percutiendo por su banda derecha de nuevo, estuvieron a punto de lograr el 2-0. Johannesson, con su internada, se quedó solo ante el portero azulgrana, pero ‘se durmió’ en el golpeo y Djalo realizó un corte fundamental.

Volvió a perdonar el jugador oviedista delante de Manu García con un intento de vaselina que se marchó alto (min. 66). El mismo destino tuvo un disparo de Toché. Poco después, Saúl Berjón se encontró con Manu García,

En el minuto 75 la historia cambió por completo. En el primer córner todo el partido para los almendralejenses, saca Kike Márquez, el balón golpea en un jugador del Oviedo y queda muerto a dos metros de la portería. Alex Barrera, curiosamente asturiano de nacimiento, mete la pierna izquierda y marca el 1-1.

A partir de ese momento, el Extremadura guardó la ropa. Sabas tapó la banda izquierda con la introducción de Aitor Fernández en esa zona. Dos disparos de Saúl Berjón desde fuera del área fueron respondidos con enormes paradones de Manu García.

Real Oviedo: Alfonso Herrero; Mossa, Bolaño, Carlos H., Johannesson; Tejera, Boateng, Javi Muñoz; Berjón, Bárcenas (Joselu, m. 72) y Toché (Ibra, m. 64).

Extremadura: Manu García; Álex García, Marcelo Djalo, Pardo, Pomares; Borja Granero, Alex Barrera; Valverde (Aitor, m. 81), Kike Márquez, Manchón (Willy, m. 45) ; Rennella.

Goles: 1-0 M. 10: Toché; 1-1 M. 74: Barrera;

Árbitro: Iglesias Villanueva, Javier (Colegio gallego). Amonestó a Joselu (87') en el Real Oviedo y a Valverde (59') en la UD Extremadura.

Incidencias: Partido correspondiente a la 1° jornada de Liga disputado en el Carlos Tartiere (Oviedo) ante 13.315 espectadores.