Angel Marcos, entrenador del Díter, fue bastante expresivo en su comparecencia en la sala de prensa. Reconoció que "yo he felicitado al equipo por el trabajo que se ha hecho y por la entrega. Todo lo que hemos trabajado a lo largo de la semana se ha cumplido. Pero la realidad es que hemos perdido y los jugadores están rotos". Se quejó de que "estas cosas inexplicables sólo le pasan a los equipos que están abajo" y se mostró un poco harto de que "nos han pitado un gran número de penaltis en los últimos partidos, pero quizás este pudo evitarse".