Lo de Matar Diop Martins es un viaje de ida y vuelta constante. Desde anoche, el senegalés vuelve a ser jugador del Cacereño, club en el que vivirá su tercera etapa. Llegó por primera vez en junio del 2013 y aquella temporada, en el Grupo IV de Segunda B, la cumplió completa, pero no renovó. Volvió en enero del 2015 y aguantó hasta enero de este año, cuando se marchó de nuevo (a petición propia). Terminó la temporada en el Caudal. Llevaba varios días entrenando a las órdenes de Adolfo Muñoz e incluso jugó 45 minutos del triangular en Guareña (ante el Mérida). Ahora vuelve a ser jugador del Cacereño y con él son ya once los que hay en plantilla.

Martins será el acompañante, a la espera de nuevos refuerzos, de Nando Copete en las labores de ataque. Ambos hicieron ya dupla el miércoles.

Martins no fue el único jugador que Adolfo probó en Guareña. También estuvo en el triangular Santi Polo, que jugó incluso más que el senegalés, ya que disputó los dos partidos. El nombre de Santi Polo no es nuevo, ya que desde la llegada del técnico, a principios de mes, ha estado sobre la mesa para jugar en el Cacereño e incluso algo más, pues también podría asumir el rol de ayudante del entrenador.

Ausencias

En Guareña hubo dos ausencias entre los jugadores de 'pleno derecho' del Cacereño. No jugó Vargas, cuyo futuro sigue siendo una incógnita, y tampoco lo hizo Carlos García, que se ha casado recientemente y tiene un permiso del club. Sí jugaron algunos jugadores de la Fundación y los brasileños, entre los que destacó Talisson.

A menos de un mes para que comience la competición, cuya fecha de inicio, en principio, se conocerá hoy, y si Adolfo quiere tener una plantilla con 18 o 19 jugadores, cuenta ya con algo más de la mitad. De momento seguirá haciendo pruebas. La próxima, el domingo en Navalmoral ante el Moralo.