Siendo quizás demasiado expresivos, se podría decir que el Alter Enersun Al-Qázeres Extremadura acude este jueves (20.30 horas) a un ‘matadero’ llamado Fuente de San Luis. Le espera un Valencia Basket con los cuchillos afiladísimos, dispuesto a montar una buena carnicería y, como pasa en los centros de despiece de animales para su consumo, no hay mucho drama en ellos. Solo la lógica de la cadena alimenticia.

Al contrario de lo que ocurre en otras competiciones, en la Liga Femenina Endesa es prácticamente imposible que un equipo de los de abajo le gane a un aspirante al título. Cuesta muchísimo encontrar que esto haya ocurrido una sola vez a lo largo de su historia contemporánea. Que el débil se vea sometido al poderoso y además con cierta holgura se ve como algo natural.

Por eso mismo nadie en el Al-Qázeres quiere engañarse a sí mismo pensando en posibilidades de victoria ante el colíder invicto, una plantilla construida para discutir el poder establecido de Perfumerías Avenida y Spar Citylift Girona. La sección femenina del club de Juan Roig, que hace apenas dos años estaba en la Liga Femenina 2, todavía no ha sido bendecida por los títulos, pero terminará sucediendo tarde o temprano.

COMPETIR // Por eso el discurso de Jacinto Carbajal el martes fue más orientado a “intentar competir lo mejor posible” que a soñar con el imposible. Pese a llevar siete derrotas en el último partidos, el vestuario no parece estar desanimado y en los dos últimos resultados negativos hubo síntomas para el optimismo en el juego, pese a que el resultado fuese el que fue.

Estoy contento con cómo el equipo va creciendo. Nos falta ser sólidos para que no se nos escapen los partidos, como ocurrió ante Zaragoza y La Laguna”, dijo el entrenador, que dijo abiertamente que su rival de la décima jornada liguera “está ya a altura de Avenida y Girona, con una plantilla incluso mejor, que está jugando muy bien, anotando mucho al contraataque y defendiendo fuerte”. Su ultrarrealista resignación llegó a un máximo cuando aseveró: “incluso haciéndolo nosotros muy bien, las opciones de ganar no son altas”. Eso sí, se consoló diciendo que “seguir mejorando en algunas facetas” y “no salir con un mal resultado” sería “una victoria”. Entre esos aspectos a mejorar están sobre todo las pérdidas de balón, auténtica rémora en los choques anteriores.

Tras el choque de Valencia llegará un parón liguero por los compromisos de las selecciones (Eleanna Christinaki y Mariella Fasoula irán con Grecia y Merve Aydin, con Turquía) hasta el día 19, cuando el Al-Qázeres recibirá a Pajariel Bembibre. En ese tipo de encuentros sí que se juega la permanencia. Lo de ‘La Fonteta’, más que un trámite, sí que es una misión imposible.