La Federación Internacional de Automovilismo (FIA) decidió no sancionar al equipo de Fórmula Uno McLaren-Mercedes por tener en su poder documentos confidenciales de sus competidores de Ferrari, pero le advirtió de que lo suspenderá si se demuestra en el futuro que ha utilizado esa información en su beneficio.

El consejo mundial de la FIA, que se reunió ayer con carácter extraordinario en París para escuchar a responsables de McLaren-Mercedes al respecto, explicó en un comunicado que "no hay suficiente evidencia" de que haya utilizado esa documentación "para interferir" de forma irregular en el campeonato. En cualquier caso, constató que el equipo alemán tenía información confidencial de Ferrari y le lanzó una seria advertencia.

"Si en el futuro se demuestra que la información sobre Ferrari se ha utilizado en detrimento del campeonato", la FIA dijo que volvería a convocar a McLaren-Mercedes ante su consejo mundial y entonces tendría que "afrontar la posibilidad de su exclusión no sólo del campeonato de 2007, sino del de 2008".

TRAFICO DE INFORMACION Por otro lado, la FIA convocó al ex ingeniero de Ferrari, Nigel Stepney, y al ex responsable de diseño de McLaren-Mercedes, Mike Coughlan, que según los elementos disponibles fueron los responsables del tráfico de la información confidencial de la escudería italiana, para que se expliquen ante su consejo mundial. Los dos deben ser objeto de una prohibición de participar en competiciones internacionales, una cuestión que se ha delegado en el departamento legal de la Federación.

La FIA había emprendido a comienzos de mes una investigación después de que se supiera que Coughlan había recibido documentación secreta de Stepney.