La cuarta etapa de la ronda extremeña finalizó con un esprint final en las calles de Fregenal de la Sierra, en el que el corredor madrileño del equipo Saunier Duval, Javier Mejías, que fue el vencedor de la primera etapa de la vuelta, logró su segunda victoria. La primera ya la había conseguido en otra llegada en masa a Miajadas. Mejías superó en el esprint a José Joaquín Rojas (Wurth-Liberty) y a Nicolay Trousov (Lokomotiv).

El líder, el salamantino Luis Roberto Alvarez (Cropusa), conservó su plaza a pesar de los ataques del equipo extremeño Spiuk, protagonizados por el corredor Fernando Torres, que fue el gran protagonista de la jornada, pues rodó en solitario 27 kilómetros y fue capturado a tan sólo dos y medio de la meta.

GRANDE TORRES Torres, natural de Llerena, estaba situado en la general a tan sólo 28 segundos del líder y en algunos momentos rodó con más de cuarenta segundos de ventaja sobre un pelotón en el que trabajaban con fuerza Cropusa y Lokomotiv. Fue poco antes de la ascensión al alto de Montemolín, en el kilómetro 97 de la etapa, cuando Spiuk destapó el tarro de las esencias.

Saltó Fernando Torres a quien se unió Fernando Herrero (Cropusa) y Manuel Vázquez (Avila Rojas) y poco después, por detrás, se producía la reacción cuando Oleg Chujda (Garcams-CV) se marchaba junto a Luis Maté (Avila Rojas) y el cacereño Angel Rodríguez (Spiuk) como hombre que vigilaba e intentaba desacelerar el ritmo para favorecer así los intereses de su equipo.

En el kilómetro 114 se unían los seis, y cuatro kilómetros más tarde, en una zona ideal para las aventuras en solitario, con carretera estrecha y con curvas, Torres se marchaba.

Fue todo un espectáculo verlo rodar, pero su ventaja fue disminuyendo cuando tomó la carretera más ancha que conducía a Fregenal, hasta que a falta de dos kilómetros y medio para la meta la ilusión del Spiuk terminó diluyéndose.

El equipo del líder y los rusos de Lokomotiv se convirtieron en máquinas de rodar por el llano y el esprint masivo, en el que venció Mejías, estaba cantado.

Hoy se disputa la última etapa, de 124,1 Kilómetros, con salida y meta en Badajoz, sobre un trazado muy llano con la única dificultad del alto de Salvaleón, en el kilómetro 55.