Dijo una vez el mítico Miguel Induráin que, si se trabajaba todos los días con mucha constancia y empeño, el ciclismo, como el vino, mejoraría con el paso del tiempo. Algo así es lo que escuchan ahora los futuros ciclistas, que disfrutarán si trabajan y se esfuerzan diariamente. Aunque disfrutar de un deporte en el que el cuerpo humano está al límite de su propia resistencia suena un tanto contradictorio. Curioso.

La pasada semana, los amalienses Antonio Nieto y Pablo Carrascosa y el trujillano Jorge Gutiérrez participaron en la concentración que la selección española de ciclismo junior llevó a cabo en la localidad alicantina de Altea. Ha sido la primera vez que coinciden tantos corredores extremeños en una misma convocatoria de Real Federación Española de Ciclismo (RFEC). Los tres pertenecen al conjunto toledano Cycling Team Ciudad de Talavera.

El cuerpo técnico liderado por Francisco Cerezo citó a 12 ciclistas para perfilar el equipo nacional de carretera de cara al Campeonato de Europa (24-28 de agosto) y el Campeonato del Mundo (20-27 de septiembre). Durante los cinco días que duró la concentración, los deportistas realizaron test y ejercicios de formación. El seleccionador valoró muy positivamente la cita y anunció la intención de la RFEC de «asistir al mayor número de competiciones posible».

La primera vez

La de Antonio Nieto (18 años, Santa Amalia) era la primera convocatoria. Reconoce que le hizo «muchísima ilusión» y que disfrutó de la experiencia. Empezó a practicar el deporte con once años, gracias a su padre, y no imaginó reunirse años después con los mejores ciclistas españoles de su generación. «He aprendido mucho y he hecho buenas amistades. Lo he aprovechado al máximo», afirma.

El joven corredor califica de «sueño» estar en las citas internacionales para las que le pueden llamar, pero tiene muy claro que si no va convocado no se acaba el mundo: «Si voy genial, pero sino seguiré trabajando al máximo». Demuestra una mentalidad fuerte y unos pies en el suelo no siempre vistos en deportistas de su edad.

Los inicios de Jorge Gutiérrez (17 años, Trujillo) fueron muy similares a los de Antonio y Pablo. Comenzó cuando tenía 13 años y, en tan solo 4, ha sido otro de los elegidos para estar con los mejores de su generación en una convivencia que le ha venido bien para «hacer buenos entrenamientos, conocer a los otros ciclistas y saber el nivel de cada uno». En su primera vez con la española asegura estar «muy agradecido» a Francisco Cerezo por la oportunidad que le ha dado.

También tiene la posibilidad de estar en las citas internacionales con el equipo nacional, aunque asegura que es «muy complicado». Para Gutiérrez, lo más importante es que ya ha estado en la concentración y que, ahora, «es el seleccionador el que tienen que decidir». Esa decisión se sabrá en pocos días. Pase lo que pase, mira a su futuro, asegurando tener «muchas ganas de seguir trabajando, progresando y mejorando».

Otra más

A Pablo Carrascosa (17 años, Santa Amalia) la llamada no le pilló por sorpresa. La última ha sido la tercera a la que ha asistido con la selección. Relata que fue una «experiencia buena, con un buen grupo de trabajo». En el horizonte también tiene la oportunidad de estar en competiciones nacionales, una posibilidad que afronta con «mucha ilusión».

Él también comenzó a montar en bici gracias a su padre, al que le acompañaba cuando «salía con los amigos por el pueblo». Pero el gusanillo por competir no se lo pegó su progenitor, sino Antonio Nieto, vecino de la localidad y hoy compañero de equipo. En pocos años han pasado de pedalear juntos por el pueblo a compartir convocatoria con el equipo nacional. Y quién sabe si competir juntos en un gran campeonato.

La de estar o no en Europeo o Mundial es una decisión tan importante que puede afectar, notablemente, la carrera de los deportistas. Pablo está cerca de representar a la selección española en competiciones internacionales. Antonio y Jorge también. No es tan descabellado pensar que los tres pueden hacerlo. Ya están entre los mayores talentos nacionales.