Denis Menchov, del equipo Rabobank, se convirtió ayer en el tercer ruso que gana el Giro de Italia al imponerse, después de un susto, en la edición del centenario por delante de los italianos Danilo Di Luca (LPR) y Franco Pellizotti (Liquigas), y del español Carlos Sastre (Cervelo). Menchov, con residencia en España, sufrió una caída en la última parte de la etapa, bajo la lluvia en un tramo de adoquinado, pero se reincorporó y terminó décimo la cronometrada, con renta suficiente para asegurarse la victoria final.

El ruso terminó la ronda italiana con 41 segundos de ventaja sobre Di Luca, 1:59 sobre Pellizotti y 3:46 sobre Sastre.

El lituano Ignatas Konovalovas, compañero de Sastre en el equipo Cervelo, fue el ganador de la última etapa, una contrarreloj de 14,4 km. por las calles de Roma en la que invirtió un tiempo de 18:42.

Con 20 segundos de ventaja y una clara superioridad sobre Di Luca en la lucha contra el crono (en la contrarreloj de 60 km. le metió casi dos minutos), Menchov tenía la victoria final asegurada, de no mediar un accidente a lo largo del breve trayecto de 14,4.

El perfil del recorrido, prácticamente plano, oscilaba entre los 20 y los 62 metros de altitud. Sólo la amenaza de lluvia, muy peligrosa en los tramos de adoquinado y en las 34 curvas, introducía un factor de incertidumbre en la última etapa. Al final no hubo sorpresas, aunque sí susto.