El entrenador del Mérida, Goran Milojevic, aseguraba ayer que "a partir de este partido vamos a mostrar nuestra manera de jugar, antes teníamos que adaptarnos al rival pensando sobre todo en defender, pero el equipo ya está mucho mejor a nivel físico".

Sus palabras revelan que el Mérida va a intentar hacer su juego por las bandas y se va a enterrar el trivote. Sin embargo, cuando se le preguntaba cómo se adaptaría el equipo al terreno de juego, Milojevic respondía resignado que "es lo que tenemos y no podemos quejarnos, incluso mañana (por hoy), no sabemos dónde podremos entrenar, aquí no podemos pisar, el Diocles está mal, en la Ciudad Deportiva no podemos y el de la Federación está ocupado, sólo nos queda el de tierra".

El caso es que parece que el encuentro de mañána, a partir de las 12.00 horas en el Romano, frente al Universidad puede ser el punto de inflexión del equipo romano, el cual volverá al 4-4-2, con Magallanes como titular.

Milojevic reconoce que "sólo contra el Murcia B tuvimos varias ocasiones de gol, en el resto una o media", por eso quiere empezar a darle un toque más ofensivo al equipo.

También ha querido matizar el técnico que cuando habló de falta de actitud la semana pasada en Fuerteventura, se refería a que "habíamos salido desconcentrados, no que mis jugadores salieran a pasearse".

Mirando hacia el futuro, el entrenador emeritense reconoce que "estos dos próximos partidos en casa son claves para el devenir de la competición", aunque prefiere "ir partido a partido, antes que echar cuentas, porque luego no te salen y te decepcionas".

Aún así, el técnico serbio del Mérida tiene en su mente "estar lo mejor posible para encarar la segunda vuelta en enero", ya que entiende que "si se consigue una racha positiva de seis o siete partidos, te puedes colocar arriba, tal y como ocurrió el año pasado con el Ceuta".