El Ayuntamiento de Mérida y el Mérida Asociación Deportiva firmaron ayer un nuevo convenio para la explotación de las instalaciones del estadio Romano. Este compromiso tendrá una vigencia de tres años, salvo que el equipo ascienda a Segunda División, en cuyo caso se suscribiría otro acuerdo adecuado a la categoría.

"Esta concesión administrativa va a suponer sobre todo una mayor autonomía del club para gestionar las instalaciones y en cuestiones técnicas y de uso", explicó el alcalde de la ciudad, Antonio Rodríguez Osuna.

El club también podrá gestionar espacios nuevos para la entidad, así como, hacer un uso comercial en las zonas que estime conveniente.

En la actualidad, explicó el alcalde, hay cuatro personas del ayuntamiento que trabajan en las instalaciones del club para trabajos de limpieza y jardinería, lo que, junto a otros gastos, supone más de 100.000 euros de coste para el consistorio. Esa gestión ahora la asume la entidad, que contará con una subvención anual municipal de 73.000 euros. Sin embargo, habrá costes, como el del consumo eléctrico, que seguirán siendo sufragados por el consistorio.

SATISFACCION Por su parte, el presidente del Mérida, Daniel Martín, insistió en que este contrato era "muy necesario" para la mejora de la gestión del club, y que está basado en tres premisas: "agilidad, sensibilidad y sensatez". El ayuntamiento, manifestó, "tiene ganas que el Mérida prospere" y recalca que, sobre todo, la gestión del césped es fundamental para "no tener la excusa de echar la culpa al césped si no hay buenos resultados deportivos". Además, avanzó que se puede hacer un uso comercial del estadio, sobre todo en la parte baja de tribuna. "Asumimos la responsabilidad de llevar la instalación a buen puerto y que el club pueda ser más autónomo", sentenció.

Además, el alcalde anunció hay un compromiso de la Federación Extremeña y de la Junta para asumir las reformas de los campos federativos para que el primer equipo pueda utilizarlos para sus entrenamientos.

OTRO FICHAJE En lo meramente deportivo, el club romano anunciaba ayer la contratación de Dani Fernández Fernández (nacido en Madrid el 30 de abril de 1997), procedente del Real Madrid Castilla. Ocuparía por tanto ficha de sub-23.

Antes de jugar en la fábrica del club blanco, donde ingresó en 2012, militó en las categorías inferiores del Valdemoro, Getafe y Leganés.

A pesar de que el Mérida lo anuncia como lateral derecho, en la página web del Real Madrid lo describen como un "extremo rápido y desequilibrante, sobre todo con sus estratégicos centros al área". En la misma ficha, el futbolista se autodefine como "rápido y vertical".