Moralo: Carlos Agut, Parri, Lolo (min. 84, Oliver), Barbero, Javi, Juli (min. 77, Fabiani), Tito, Dani Baños (min. 44, Crece), Cristian, Beni Besale y Miguelín.

Mérida: Diezma, Diego, Pepe Martínez, Muiño, Pedro José, Jonathan Rey (min. 76, David Copito), Jabuto (min. 84, Manuel Angel), Olivar, Belencoso, Benítez y Roberto (min. 84, Javi Vicente).

Goles: 0-1, min. 13: Roberto. 1-1, min. 33: Javi. 1-2, min. 81: Benítez, de penalti.

Arbitro: Sánchez Laso (1). Roja directa al visitante Belencoso (40´). Amarilla a los locales Dani Baños y Parri y a los visitantes Javi Vicente (dos y expulado 93´), Olivar, Roberto, Pedro José, Jonathan Rey y Manuel Angel.

Incidencias: 300 espectadores en el Municipal. Mensaje de apoyo local al accidentado Guillén, exjugador del Moralo.

La lógica del fútbol decidió el resultado final. El Mérida sigue contra viento y marea en el primer puesto de la clasificación y aunque no hizo un buen partido se llevó los tres puntos. Por su parte, el Moralo, incapaz de frenar su mala racha, ve como el Imperio se le coloca a tres puntos y el golaverage perdido.

En un partido jugado en una hora atípica en Tercera División --domingo a las nueve de la noche--, el Mérida fue superior desde el principio e incluso cuando jugó más de medio tiempo con un jugador menos y los últimos minutos con sólo nueve hombres sobre el campo. La responsabilidad atenaza el juego del Moralo y los de David Salvo ya son incapaces de hacer el fútbol que mostraron durante gran parte del torneo. Debutó en casa el santanderino Cristian, aunque apenas entró en juego.

El Mérida supo aprovechar sus ocasiones y así, en el minuto 13, un grave error de Javi deja a Roberto el camino libre para marcar el 0-1. A balón parado, no podía ser de otra manera, empató el Moralo. Falta botada por Beni Besale superada la media hora que Javi cabecea a la red.

AGRESION Y MAL GESTO El placentino Javi fue protagonista de otra jugada al ser agredido por Belencoso, lo que le costó al goleador emeritense la expulsión. Por cierto, dio un vergonzoso corte de mangas al respetable cuando se marchaba a vestuarios.

En la segunda parte se igualó el juego e incluso las ocasiones, una clara para cada equipo. Pero ni Juli en el minuto 55 ni Jonathan Rey en el 58 acertaron con la puerta contraria.

Cuando el 1-1 parecía el resultado al que se dirigía el partido, Parri comete un innecesario penalti sobre Benítez, quien transforma en el 1-2 definitivo. El Moralo se volcó, pero ya fue tarde.