El Mérida, con el problema de su entrenador y la liquidez; el Extremadura, con el caso de su exclusión voluntaria de la Copa Federación. A tres días del derbi, ambos intentan centrarse en ganar el domingo, aunque la actualidad paralela continúa.

El Mérida, por ejemplo, no podrá fichar en el mercado de invierno ni tampoco conceder bajas mientras no haga frente a una deuda que mantiene con cuatro jugadores de la pasada temporada, que prefieren mantener el anonimato y que ya han presentado la correspondiente denuncia ante la AFE. El montante de la denuncia es casi irrisorio: 6.120 euros (sobre un millón de pesetas), pero bloquea al club. En lo estrictamente deportivo, Golo tiene más posibilidades de jugar que Cubillas.

Mientras, el Extremadura está centrado, después de retirarse de la Copa Federación, en el partido del domingo en el Romano de Mérida. El técnico azulgrana ha estado durante toda la semana pendiente del derbi, aunque con la incógnita de saber si finalmente tenía que jugar en el municipal de Villanueva de Cordoba. Una vez consumada la retirada del equipo de la competición federativa, ahora sólo queda la liga y en eso está centrada la plantilla. Los resultados obtenidos en las dos últimas citas liguera hace que en el seno de la plantilla se haya alojado una buena dosi de optimismo.

CUARTO DERBI VISITANTE El partido será el cuarto derbi de la temporada que disputen los azulgranas. Los dos jugados en el Francisco de la Hera se saldaron con empate a un gol, frente al Villanovense y el Badajoz el domingo pasado. A domicilio el único partido disputado en la región lo saldaron con victoria. Fue el pasado mes de septiembre en el Príncipe Felipe. Para el partido del Romano, el técnico no podrá contar con Toni García, lesionado en un codo. Alcázar tampoco ha entrenado.