LANZAROTE 1: Tomás; Cifuentes, Pablo Suárez, Sergio, Aitor Blanco, Vladimir, Eneko Pinedo (Santi Torres, min. 93), Nacho Castro, Maciot (Miki, min. 78), Raúl Salas y Pepe Parrado (Alejandro, min. 57).
MERIDA 0: Ramón; Salva, Cubillas, Cuevas, Raúl, Calvo, Muños, Diego (Arenaza, min. 60), Johny, Benítez y Golo (Raúl Rodríguez, min. 66).
GOL: 1-0, min. 45: Pepe Parrado.
ARBITRO: Javier Lozano (murciano). Expulsó a Nacho Castro (min. 56), por dos amonestaciones, y mostró amarilla a Sergio, Aitor Blanco, Alejandro, Cifuentes, Pepe Parrado y al Mendilibar, así como a Benítez y Salva.
La Unión Deportiva Lanzarote derrotó al Club Deportivo Mérida en un regular partido, en el que el equipo lanzaroteño acreditó más garra que calidad, ante un rival que despreció la ventaja numérica que le supuso la expulsión de Nacho Castro.
La carencia de orden en el juego habitual que desarrolla el equipo lanzaroteño y la práctica ausencia de oportunidades de gol marcó el signo de una primera parte, que, sin embargo, mantuvo el interés.
Destacó la viveza del quehacer en el inicio, donde el conjunto emeritense trató de tú a tú a su adversario, aunque después del cuarto de hora bajó el pistón, replegó líneas y se limitó a contener. Con el predominio de las defensas sobre los ataque, la situación estuvo clara, porque apenas se vieron situaciones de elevado peligro ante las porterías.
EL UNICO GOL Al filo de la media hora, Pepe Parrado ganó la espalda a la defensa adversaria, recogió un pase vertical que le llegó desde la línea de medios y, desde la frontal del área grande lanzó con inteligencia, de forma parabólica, y Ramón, bien situado, atajó con exquisitez.
Pepe Parrado, cuando parecía que el 0-0 sería el resultado con que ambos equipos se irían al descanso, se adelantó a propios y extraños, cabeceó casi debajo de los palo e hizo inútil la estirada de Ramón.
En la reanudación, se apreció un juego anodino, tanto como en los primeros 45 minutos, ya que en el terreno de juego unos y otros se dedicaron a pugnar sin ton ni son, aunque con mucho uso de la potencia física.
Los jugadores isleños se dedicaron a mantener el resultado, más aún cuando Nacho Castro, expulsado, se encaminó a vestuarios. Justo un minuto antes de que el cuadro canario quedara con un efectivo menos, Benítez recortó a su marcador, tiró a portería y el esférico lamió el palo derecho de la portería que defendió Tomás.
Con uno más, los jugadores que entrena Andrés Tebar buscaron el área rival no pudieron ni supieron rentabilizar su superioridad, ya que no encontraron la fórmula para rebasar la cobertura lanzaroteña, que se empleó con firmeza para evitar que su meta se viera comprometida.
Cubillas, a los 84 minutos cabeceó después de un centro de Benítez y el balón salió por encima del travesaño. Dos más tarde, en una cesión equivocada de Cubillas a Ramón, a punto estuvo de producirse el 2-0, pero éste atajó en última instancia.
