Cual culebrón venezolano con final inesperado se puede calificar el supuesto aplazamiento del partido entre el Mérida y el Villanueva de Córdoba motivado por la resiembra del Estadio Municipal Romano. Al final el encuentro se jugará en el campo de Diocles el domingo, ya que la Federación Española le ha notificado al club a través de en un fax que considera que la resiembra no es un hecho de fuerza mayor como para aplazar un encuentro.
Ante esta situación el cuerpo técnico, directivos y técnicos del Ayuntamiento de Mérida estuvieron reunidos en la tarde-noche de ayer para estudiar la preparación del campo y que tenga todas las garantías de seguridad.
ENFADO La indignación del presidente del Mérida, José Fouto, es doble. Por un lado, con el Villanueva de Córdoba "por la actitud que ha mantenido, no queriendo colaborar nunca", y por otro con la Federación Española de Fútbol porque "sólo han atendido a los argumentos del Villanueva que no son ninguno. Además --añadía-- si ocurre algo la responsabilidad es de la Federación Española, porque ellos están informados desde el miércoles pasado y nos han respondido hoy (por ayer)".
La solución del Diocles es de toda garantía "porque cumple con todos los requisitos que nos pide la Federación, ya que ahí se ha disputado durante tres años Superliga Femenina. Además, en Segunda B no es obligatorio que estén los espectadores sentados", aseguraba el presidente emeritense. "El único problema es que no está vallado el terreno de juego pero estamos hablando con los técnicos municipales para buscar la solución". El Mérida tiene de plazo hasta mañana las 11 para presentar un campo a la Federación y el horario, en este sentido, "seguramente el partido va a ser a las cinco porque no hay luz", aseguraba Fouto, quien además quería hacer un llamamiento a la afición ya que la entrada va a ser gratuita.
