Difícil misión para el Cacereño en el último partido del 2013. Visitará al Cádiz esta noche (20.30 horas) con la doble dificultad de jugar frente a un rival poderoso y hacerlo además con muchos problemas físicos en sus filas.

No es la mejor manera de afrontar un choque que, en otras circunstancias, permitiría realizar cálculos más benignos. El propietario del Ramón de Carranza es tercero, empatado con el cuarto, el Cartagena, a seis puntos de los verdes, que sueñan con coger la estela de la fase de ascenso a Segunda.

Visto así, no parecería malo arrancar un empate que permitiese dejar las cosas como están y afrontar el nuevo año con otra visión, sobre todo a nivel de disponibilidad de la plantilla.

Angel Marcos tendrá que echar mano de la cantera para completar la convocatoria. Tiene cuatro bajas seguras (Aarón y Pizarraya por sanción y Martins y Medina por lesión), a lo que tiene que unir que tres de sus futbolistas apenas han entrenado durante esta semana por distintos problemas físicos y son serias dudas, Carlos Valverde, Iván Pérez y José Ramón. Los tres entrarán con calzador en el autobús que parta esta mañana hacia Cádiz, pero en condiciones normales probablemente no contarían. Alguno de ellos tendrá que jugar, probablemente el que menos mal esté.

EQUILIBRISMOS La ausencia de personal obligará al técnico a hacer una alineación de verdaderas circunstancias. Como el fichaje Toni Sánchez todavía no puede ser inscrito, el puesto de Pizarraya en el lateral izquierdo lo ocupará un central como Gonzalo Llerena. En el mediocentro, para acompañar a Checa estará o Dani Pérez o Mejías. Y en ataque, regresará Toni al nueve y, con José Gaspar como único valor fijo, lo demás es una incógnita. Dos jóvenes como el centrocampista Manolo y el central Alvaro estarán en la lista.

Marcos escogió ayer la opción de no lloriquear ante el panorama que se le presenta. "Estamos bien. Las bajas son las que son, hay que aguantar el tirón y con ellas tenemos que afrontar el partido. No vamos allí a contemplar el estadio y no tenemos miedo: solamente hemos perdido uno de los últimos doce que hemos jugado, así es que...", indicó.

La otra cara del dato es que el Cacereño solamente ha sumado uno de los últimos seis puntos en juego. La derrota en Guadalajara (4-0) y el empate en casa frente al San Fernando (1-1) han frenado en algo el ímpetu de un equipo que empezaba a verse en el vagón de cabeza. Sin embargo, las opciones para el 2014 se avecinan intactas.

EL RIVAL No está siendo una temporada muy regular para el Cádiz, construido para ser campeón de grupo y reconquistar la Segunda División y también metido en una constante crisis institucional. Eso sí, en casa se ha mostrado bastante sólido, dejando escapar solamente un par de empates --ambos a cero-- frente a La Hoya Lorca y Cartagena. El resto han sido victorias. Viene de ganar en La Roda ofreciendo muy buena imagen (1-4).

Su técnico, Raúl Agné, no podrá contar con Nafti, con molestias, y Tomás y Andrés Sánchez, dos laterales izquierdos, son ausencias de larga duración, lo que obligará a situar a un diestro como Ceballos en esa posición. Se espera recuperar al central Fran Pérez, que se ha perdido algún entrenamiento de esta semana por precaución.

"El Cacereño va a ser un rival muy duro. Es un equipo que suele llevar siempre el mismo. Se siente muy cómodo como visitante", comentó el entrenador del Cádiz a la prensa local.