La asombrosa efectividad de Leo Messi en este inicio de Liga rompe con cualquier precedente. El espectacular arranque del argentino, el mejor desde que debutó con el Barça en el 2004, precisamente en un derbi con el Espanyol en Montjüic, le coloca en unas cifras estratosféricas. Messi, que ha rematado tres veces menos que todo el Espanyol de Pochettino junto, ha marcado los mismos goles en el campeonato: 17. El azulgrana mejora a cada campaña que pasa con Guardiola porque prácticamente dobla los registros goleadores de las dos últimas temporadas.

El Espanyol ha necesitado casi 200 remates para lograr los 17 tantos de Messi. Y el reparto blanquiazul se ha distribuido entre siete jugadores, siendo el argentino Osvaldo su pichichi, con cinco goles. No pueden, sin embargo, competir con la eficacia que irradia la estrella azulgrana. Ni en los mejores días de Messi con Guardiola estuvo tan certero. En el primer curso llevaba 9 goles en las 15 primeras jornadas y acabó con 23. En el segundo, logró 9 también y terminó con 34, igualando al extraterrestre Ronaldo de 1997.

Ahora, Messi está batiendo a Messi, justo cuando ayer se cumplía el décimo aniversario de su llegada a Barcelona. En los cuatro primeros meses del campeonato casi dobla sus goles (pasa de 9 a 17) y eso que se ha perdido dos encuentros por lesión. Pero la progresión de Messi no tiene límites, empeñado como está en demostrar en cada partido que nadie puede con él. Cada día que pasa, Messi es mejor. Y seis años y dos meses después, se cruza con el Espanyol. El sábado será en Cornellà, la nueva casa perica.

AFELLAY LLEGA EL DIA 23 Con Messi disparado hacia no se sabe dónde, con Guardiola y sus compañeros agotando los adjetivos, el club anunció ayer la llegada de Ibrahim Afellay para el próximo 23 de diciembre, a punto de iniciarse las fiestas navideñas. El aún jugador del PSV Eindhoven disputará el último partido con su club el día 22, en un choque de la Copa holandesa en el campo del Roda.