Llegó al vestuario y no estaba. Llegó Leo Messi y no se encontró a Luis Suárez, su amigo del alma. De ahí, que su mensaje de despedida, a través de Instagram, su canal habitual de comunicación, fuera de agradecimiento hacia el uruguayo, manteniendo, además, en todo momento, la crítica hacia la gestión de Josep Maria Bartomeu.

"No merecías que te echen como lo hicieron. Pero la verdad es que esta altura ya no me sorprende nada", ha escrito Messi. "Va a ser raro verte con otra camiseta y mucho más enfrentarte", ha reconocido el astro argentino sobre el nuevo duelo con Suárez, ya con zamarra del Atlético de Madrid.

"Te merecías que te despidan como lo que sos: uno de los jugadores más importantes de la historia del club, consiguiendo cosas importantes, tanto en lo grupal como individualmente. Y no que te echen como lo hicieron", ha indicado.

"Ya me venía haciendo a la idea, pero hoy entré en el vestuario y me cayó la ficha de verdad", ha confesado el capitán azulgrana. Messi está más solo que nunca y peleado, más que nunca, con la directiva de Bartomeu.