México saldrá a mostrarle al mundo su título de favorito en Alemania 2006 al enfrentarse a Irán, un rival impredecible, hoy domingo en el estadio mundialista de Nuremberg. De la mano de su capitán Rafael Márquez, campeón de España y de Europa con el Barcelona, México exhibirá los argumentos que hicieron que la FIFA lo hiciera favorito del grupo D, para intentar arrancar con una victoria el Mundial 2006.

Será la primera ocasión en un mundial --México ha asistido a doce antes de Alemania-- en la que será el favorito, el rival al que todos aspiran a superar, el obligado a proponer y a jugar y a mostrar que su fútbol ha crecido.

Se encontrará con una selección de Irán que busca su segunda victoria en un Mundial en su tercera presencia en la competición después de Argentina´78 y Francia´98. En los últimos días, los iraníes han lanzado un mensaje claro desde su base en Friedrichshafen de que no van de víctimas y que el equipo que se confíe ante ellos lo puede pagar caro.

La actual selección iraní, que durante 2005 llegó a alcanzar el puesto 15 en el ránking FIFA, nada tiene que ver con aquellos dos equipos que llegaron a Argentina y Francia hace veintiocho y ocho años, respectivamente.

De la mano del croata Branko Ivankovic, Irán presenta un once competitivo que tiene a gala ser el primer equipo que logró la clasificación para el actual Mundial, pero cuenta con una baja importante, la del centrocampista del Kaisserlautern alemán Ferydoon Zandi, lesionado.