Kaká sigue siendo tema de conversación en el Madrid. El brasileño, por el que el club blanco pagó 65 millones, no ha acabado de dar el rendimiento que de él se esperaba y Mourinho ha pasado de ser optimista sobre la recuperación del jugador a pasar la responsabilidad al departamento médico de la entidad.

Desde que reapareció tras superar una grave lesión de rodilla, Kaká no se siente el mismo. Su dolencia, un síndrome que le provoca dolor en la parte externa de la rodilla, no le ha permitido estar en los dos últimos partidos del Madrid. A estos dolores se suman los incesantes rumores sobre una posible salida de la entidad de Concha Espina en junio.

Adriano Galliani, vicepresidente del Milan, aseguró que para que Kaká pueda regresar al club rossonero debería reducirse mucho el sueldo cobra nueve millones netos por temporada. Lamento que tenga problemas, pero solo podemos permitirnos el sueldo de un Ibrahimovic", dijo.

En principio, Florentino Pérez no está dispuesto a venderle porque siempre espera que sus fichajes respondan. Ahí está el caso del Benzema, que parece haber renacido y en los últimos tres meses ha marcado 15 goles. "Tenemos la ilusión de ver la mejor versión de Kaká", mantiene cada vez que se le pregunta el presidente del Real Madrid.

Kaká ha negado desde su Twiter que esté cansado de Mourinho, pero su inquietud es notable.