Me entero por el excelente carrusel deportivo dominical de Canal Extremadura Radio --eso sí que es un servicio público de calidad-- que el futbolista Ramiro ha vuelto a la región. El fornido punta ha fichado por el Jerez, líder de la Tercera. El del delantero, un tipo espléndido, es un ejemplo más del cumplimento de una de las variables que acreditan el bajo perfil en el que se sigue desenvolviendo el fútbol extremeño. Ramiro, como otros, tuvo que emigrar este verano y no se fue a ningún club importante sino al ¡Comarca de Níjar de Almería!. Aquí no había equipo que lo quisiera. Ni siquiera el Cacereño, que le ofreció unos pocos euros. Humillado, el futbolista se marchó al equipo andaluz. Muchos jugadores extremeños dan con sus huesos en clubs de la zona sureste de España, donde prometen unos sueldos dignos, aunque algunas veces no los pagan. Es la miseria del fútbol español en general y el extremeño en especial, metido de lleno en una espiral negativa.