Maracaná será el escenario de una ceremonia de apertuar de los Juegos Olímpicos de Río que quiere y espera estar a la altura de las últimas inauguraciones que desde los Juegos de Barcelona en 1992 han dado momentos emotivos y espectaculares para el recuerdo desde la última edición vivida en Wembley en el 2012.

Londres, de cine

La ceremonia fue una película en directo. La capital británica era la primera ciudad que acogía por tercera vez unos Juegos, después de los de 1908 y 1948. Fue una inauguración enormemente simbólica, incluso empezó a las 20.12 horas, y muy british . Recuérdese la escena de la reina Isabel II acompañada de James Bond o la aparición de Mr. Bean. Tuvieron su espacio William Shakespeare, J.K Rowling, David Beckham, Mike Oldfield, entre otros. Incluso Paul McCartney cantó la mítica Hey Jude . Fue una ceremonia emocional y mágica.

Pekín, fría majestuosidad

Siguiendo la tradición oriental que asegura que el ocho es el número de la suerte, el 8 de agosto (mes ocho) del 2008 a las 20.08 comenzó una inauguración monumental. El estadio nacional se mostró al mundo imponente gritando al mundo que China está preparada para ser la primera potencia mundial. Espectacular fue ver al gimnasta Li Ning correr suspendido alrededor del estadio antes de encender el pebetero.

Sídney, fuego y agua

La inauguración cumplió con las expectativas. La ciudad australiana hizo bandera de innovación tecnológica e imaginación. El momento más recordado es el encendido del pebetero. El fuego luchó contra eterno rival: el agua y de ahí surgieron las llamas. Pura magia. El pebetero hizo honor al lema olímpico Citius, altius, fortius y se erigió majestuoso. La atleta aborigen Cathy Freeman fue la encargada de encender el pebetero, convirtiendose en la segunda mujer en la historia en hacerlo, la primera fue Enriqueta Basilio Sotelo en los Juegos de México 1968.

Atenas, vuelta a casa

Los Juegos volvía a su hogar, Grecia, el país que los vio nacer y quiso estar a la altura. El estadio olímpico de Atenas Spyros Louis apareció con un mar Mediterráneo en el centro. Una piscina gigante de fibra de vidrio que drenó el agua en dos minutos. La cantante islandesa Björk interpretó, con su particular voz, el tema Oceania y el pebetero lo encendió el campeón de vela, Nikolaos Kaklamanakis que subió las escaleras y entonces el caldero, diseñado por Santiago Calatrava, empezó a inclinarse.

Atlanta y Mohamed Alí

Aquel año era el centenario olímpico pero el aniversario no fue todo lo grandioso que debía ser. Su ceremonia recordó demasiado a la de Barcelona. Los organizadores dieron un golpe de efecto gracias a la participación de Celine Dion, pero sobre todo del mítico boxeador Mohammed Alí, quien a pesar de tener un avanzado párkinson, encendió la llama.

Barcelona y su ¡Hola!

Barcelona marcó un punto de inflexión en la ceremonia inaugural. Aquel 25 de julio de 1992 Barcelona se abrió al mar y al mundo. Un espectáculo alegre, colorido y mediterráneo. Inolvidable Antonio Rebollo tensando el arco y la flecha en llamas para hacer arder al pebetero. Una ceremonia espectacular que comenzó con un emotivo "Hola" de bienvenida que el publico apoyó gritándolo al mundo entero.