Miguel Angel Montañana ya entrenó ayer con sus nuevos compañeros del Cáceres Patrimonio de la Humanidad. Se mostró en buen estado físico y muy dispuesto a colaborar en la mejora del equipo tras anunciarse el jueves que sería el sustituto de Kelsey Williams.

Montañana viajó desde su Valencia natal y, aunque no pudo estar en el entrenamiento de la mañana, sí le dio tiempo a pasar el reconocimiento médico y a formar parte del de la tarde.

A punto de cumplir los 34 años y con una larga trayectoria profesional en EBA, LEB Plata y LEB Oro, su última experiencia profesional fue exótica: en el Mongomo de la liga de Guinea Ecuatorial. Allí estuvo jugando hasta octubre. Mientras esperaba un nuevo contrato no ha estado sin hacer nada, ya que ha entrenado varios días por semana con el Valencia Basket de Liga EBA.

ACOPLAMIENTO RAPIDO Su nuevo entrenador, Ñete Bohigas, espera que se integre lo más rápido a sus sistemas, superando a Williams en el que probablemente era su aspecto más flojo, el de la adaptación al baloncesto nacional. Sin embargo, el técnico tendrá que variar en algo sus planteamientos: Montañana es conceptuado como un '5' --mide 2,06-- y en esa posición ya tiene a otros tres jugadores como Javier Carter, Mansour Kasse y Miguel Angel Conejero. Uno de ellos tendrá que alejarse del aro. Otra opción es emplear más en ese papel al alero Juanma Ruiz.

La versión del club es que la operación Montañana-Williams será la única hasta el cierre del mercado, a finales de febrero, pero nunca se sabe. El 6 victorias-5 derrotas en la clasificación está por debajo de lo esperado. De momento, y aunque no tenga mucho relieve porque se trata de un jugador marginal, ya se ha dado luz verde a Carlos Ferreiro para que abandone el equipo en busca de minutos más allá de los once que acumula en toda la temporada. Según el entorno del jugador, le molestó especialmente no saltar a la pista ni tan siquiera cuando el partido ante el Araberri estaba totalmente decidido.