Moralo: Alex, Víctor, Luis Trujillo, Manu, Javi Núñez, Dani Baños, Raúl, Javi Herrera (Emiliano Lattes, minuto 67), Alfonso, Beni Besale y Gallardo (David Toribio, minuto 78).

Jerez: Alex, Collado, Angel González, Jose, Carlos, Tino, Yeyo, Chema, Angelito, Kike y Roberto.

Arbitro: Pajares Holguín (2). Enseñó cartulinas amarillas a los jugadores locales Javi Núñez y Dani Baños y a los visitantes Yeyo y Collado.

Incidencias: Alrededor de 250 aficionados se dieron cita en las gradas del estadio Municipal de Navalmoral de la Mata. Tarde soleada y de temperatura agradable para la estación invernal y terreno de juego en mal estado.

Para lo que suelen ver los aficionados del Municipal de Navalmoral de la Mata, el partido mereció la satisfacción de los presentes tras completarse un entretenido choque en el que primó la igualdad. El reparto de puntos hizo justicia a la entrega común y al interés mostrado por ambos pese a las dificultades que oponía el mal estado del césped.

El veloz y atrevido juego ofensivo de los visitantes obligó al Moralo a una atención constante en su zaga. Gran partido de la defensa verdiblanca con un acertado planteamiento de su entrenador Carlos Sánchez que supo ver la necesidad de protegerse ante un Jerez que dejó huella de buen equipo en su visita a Navalmoral.

SIN GOLES Eso sí, el partido tiene pegas importantes primero con la ausencia de goles y después con la falta incluso de ocasiones claras. En la primera parte el visitante Alex despejó un remate cercano de Luis Trujillo (m.14) en la única oportunidad local; mientras que los visitantes contaron las suyas con una remate pasado de Roberto (m. 22) tras aprovechar una indecisión de la defensa y una buena parada del local Alex (m. 37) tras remate de Kike. En la segunda parte el Moralo lo intentó con un par de remates aislados del hispano argentino Emiliano Lattes (minutos 75 y 81) mientras que Tino tuvo la mejor del Jerez en un disparo cruzado (minuto 88).

El Jerez sigue sumando una jornada más y el Moralo continúa sin ganar en casa pero al menos con la satisfacción de haber hecho un buen partido.