El centrocampista del Celta Alexandre Mostovoi, protagonista de una nueva espantada de tres días en los que ha estado desaparecido para el club, regresó ayer a Vigo y a los entrenamientos.
El futbolista ruso, sancionado al recibir tarjeta amarilla en el partido de ida de la eliminatoria de repesca ante País de Gales, ni siquiera viajó al Reino Unido con su selección ya que desde el lunes se conocía que no había prosperado el recurso presentado.
Lo cierto es que Mostovoi apareció a primera hora de la madrugada de ayer en el aeropuerto de Vigo. Al bajar del avión tan solo apuntó que se había tomado tres días de vacaciones, "que me hacían falta después de tanto partido seguido", explicó.
El polémico astro de la plantilla céltica habló con el técnico y se ejercitó en el gimnasio en una jornada de trabajo voluntario sin ofrecer más explicaciones.
El gerente del club Sabino López señaló que antes de hablar de sanción " hay que escuchar al jugador y luego ya veremos que se hace", y aclaró: "Aún no hemos tenido esa conversación por lo que no hay nada decidido".
