Greg van Avermaet es un magnífico ‘clasicómano’, capaz de ganar cualquier carrera primaveral de un día, pero lejos de ser un aspirante a la victoria final, aunque es muy probable que aguante de líder, al menos hasta la segunda de las tres etapas de los Pirineos (el próximo sábado, en Luchon). "Vamos a pelear por aguantar este jersey amarillo, si es posible, hasta Andorra. No lo vamos a regalar. Todo el equipo estará con Greg", avanza Yvon Ledanois, técnico del BMC.

Era el mismo director francés del conjunto estadounidense que se frotaba las manos en su coche cuando su corredor gozaba fugado de casi un cuarto de hora de ventaja. Y el mismo Ledanois que empezó a preocuparse cuando vio, cuando descubrió como todo el mundo, que se ponían en marcha, en este caso como aliados, las maquinarias delSky y el Movistar, los dos equipos más potentes de este Tour (ellos sí trabajan como escuadras serias) que se negaron a permitir que un ciclista adversario se vistiera de líder con una diferencia de escándalo, en el día en el que Vincenzo Nibali perdió ocho minutos.

ENSAYO PIRENAICO

El Movistar, además, puso un punto más que la escuadra británica, lo que le sirvió para ensayar la fórmula de trabajo, a dos días del debut pirenaico. Y porque hubo un momento en el que pensó que podía anular la escapada pensando en la posibilidad de queAlejandro Valverde se vistiera de líder. Cuando el conjunto español se retiró, el Sky aprovechó también para entrenar el sistema que emplearán en la montaña, sin agotarse en exceso, ya que consideraron que cinco minutos es un tiempo prudente para anular a Van Avermaet cuando sea necesario. O a la espera de que el belga ceda por su propio peso.

Además, a Movistar y Sky ya les va bien que un conjunto con cara y ojos como el BMC se responsabilice de la carrera, evite fugas molestas y deje el Tour en su jugo ante la señal de movimientos: los lugartenientes españoles, Valverde y Mikel Landa, y las ‘vedettes’ de los dos equipos, Nairo Quintana y Chris Froome; Movistar y Sky mostraron sus cartas, que no tenían necesidad de esconder.