Garbiñe Muguruza se mostró muy feliz, a la par que exhausta, tras la consecución del título de Roland Garros, su primer grande. "Cuando me he dado cuenta de que he ganado ha sido una combinación de ilusión y de un sueño cumplido, de un torneo que desde pequeñita he querido ganar. Es algo que ya he tachado de la lista", aseguró la jugadora de 22 años.

Consciente de la importancia de lo conseguido, la hispanovenezolana mostró su ambición por seguir creciendo. "No me conformo con esto. Hoy es un día para celebrar, para no pensar. Pero me gustaría seguir ganando torneos como este, dominar en la pista, sentir que el partido depende de mi", confesó. Y es que a Muguruza le gusta pensar en grande y no lo oculta. "Me considero una persona ambiciosa, que tiene carácter, que le gustan las situaciones de competitividad, que esté llena la grada, jugar con una rival como la de hoy, que te obligue a competir. Por eso estoy feliz de haber jugado bien y haberle ganado a una de las mejores jugadoras".

En su memoria aparece en un momento así todo su equipo, pero en especial su familia, que le ha acompañado en la quincena parisiense pero a la que el tenis le ha privado muchos días de su hija. "Se han sacrificado mucho para que sus hijos jueguen al tenis, sobre todo yo. Nunca he estado con ellos y haberlos tenido aquí estos días ha valido la pena", dijo.

"ES BUENO QUE HAYA NOVEDAD"

Muguruza estaba orgullosa de haber podido tutear a toda una Serena Williams, de haber mantenido el pulso a una de las mejores tenistas de todos los tiempos, que buscaba su Grand Slam número 22, el histórico récord que ostenta la alemana Steffi Graf. "Contra ella nunca tienes la sensación de tener el control, le pega muy fuerte, es poderosa. Cuando he ganado el primer set me ha dado calma, pero siempre es complicado. Creo que puedo plantar cara a Serena y hoy lo he demostrado", aseguró.

Muguruza se ha convertido en la tercera tenista consecutiva que vence a Williams en un Grand Slam, un signo del relevo que está habiendo en el tenis femenino. "Durante mucho tiempo Serena ha dominado mucho los Grand Slam. Creo que hay que renovar ese proceso de que alguien gane tanto, que esté más repartido, que todo el mundo sienta que pueda ganar. Es bueno para el tenis femenino, que haya más novedad", comentó.

UN FUTURO BRILLANTE

Por su parte, la estadounidense Serena Williams aseguró que Garbiñe Muguruza "tiene un futuro brillante por delante. No tengo dudas de eso. Ya juega en los grandes estadios y a partir de ahora ya sabe lo que es ganar un Grand Slam. No voy a buscar ningún tipo de excusas. La realidad es que no he mostrado el nivel de juego suficiente para ganar a mi rival", señaló la tenista, que perseguía su 22 Grand Slam, igualando así a la alemana Steffi Graf.

Williams, de 34 años, indicó que en los próximos días analizará la final y tratará de obtener "las lecciones de la derrota y ver qué se puede hacer para mejorar". La estadounidense ha perdido las finales de los dos últimos Grand Slam y ya encadena tres sin levantar el trofeo, pero no lo atribuyó a la presión que pesa sobre sus espaldas por igualar el récord de Graf. "No, no es por eso, he jugado contra dos rivales que lo han hecho mejor que yo. Angélique Kerber en Australia cometió solo 16 errores en tres sets, así no se puede hacer nada. Garbiñe ha mostrado un nivel de juego increíble, hay que seguir trabajando sin descanso para ganarlas", aseguró.