Un tapiz verde, casi inmaculado. 20 grados de temperatura. Sol y una central llena. La misma en la que el año pasado Garbiñe Muguruza había disputado la final contra Serena Williams. Un escenario para no olvidar y en el que minutos antes el campeón Novak Djokovic, había abierto el torneo con una cómoda victoria ante el ingles James Ward (6-0, 7-6, 6-4).

Muguruza tuvo que forzar la máquina para salir airosa porque la italiana Camila Giorgi (número 67 mundial) la forzó al límite, durante una hora y 53 minutos, antes de caer por 6-2, 5-7 y 6-4. "Ha sido durísimo. Giorgi ha jugado a un gran nivel", valoró Muguruza que, después de dominar a su rival en el primer set, vio cómo la italiana mantuvo un pulso hasta arrebatarle la segunda manga y forzarla a una batalla en la que fue definitiva la rotura del saque a Giorgi (2-1), en un tercer juego de nueve minutos. Ganó Muguruza al séptimo break point para no dejar escapar ya la ventaja.

También tuvo que luchar durante más de dos horas Carla Suárez para acompañar a Muguruza a la segunda ronda. La canaria necesitó forzar las tres mangas antes de superar a la china Shuai Zhang (número 63) por 6-3, 3-6 y 6-4, tras levantar un 1-3 en contra en la tercera manga. Y del sufrimiento tampoco se escapó Lara Arruabarrena antes de ganar a Olga Govortsova por 6-2, 1-6 y 8-6.

La veteranía es un grado y David Ferrer lo demostró en su debut del que salió victorioso en 65 minutos y cediendo solo cuatro juegos al israelí Dudi Sela (6-2, 6-1, 6-1). Evitó relajarse para no tener sorpresas, algo que no hizo Nicolás Almagro que, tras adelantarse con dos sets a cero ante el brasileño Rogerio Dutra Silva, imponiéndose por 6-3, 7-6 (8-6), 5-7, 3-6 y 6-3. No pudieron imitarles ni Pablo Carreño que cayó ante el canadiense Milos Raonic por 7-6 (7-4), 6-2 y 6-4 ni Guillermo García López que perdió ante el italiano Andreas Seppi por 6-2, 6-4 y 6-0.