Intranquilidad, nervios, falta de respuestas y cálculos, muchos cálculos. Los clubs extremeños de categorías profesionales ven agudizada la indefinición de sus proyectos de cara a la próxima temporada. Nadie en el gobierno autonómico entrante del Partido Popular les ha comunicado aún con qué ayudas contarán --si es que va a haber alguna, una cuestión muy en duda--, por lo que, siendo la mayoría de las entidades dependientes de ese dinero público, el panorama se torna oscuro. Y es que ahora es el tiempo en el que hay que formalizar las inscripciones ante las respectivas federaciones.
El nuevo ejecutivo de José Antonio Monago todavía no ha tomado posesión, pero en materia deportiva ya tiene sobre la mesa un arduo problema que resolver. Durante los últimos años, y especialmente en la campaña electoral, al futuro presidente de la Junta no le ha importado decir que le parecía un derroche la iniciativa publicitaria de Marca Extremadura, de la que se han nutrido los clubs para poder sacar adelante sus proyectos. Se da por hecho que la empresa pública será cerrada.
¿Qué pasará con los equipos y deportistas que, sin ir más lejos, han percibido la pasada temporada unos tres millones de euros por esta vía? Nadie lo sabe a ciencia cierta, pero es precisamente ese silencio lo que ha hecho aumentar la inquietud en las últimas semanas. Cada una por su lado, las entidades están buscando un interlocutor en la futura Junta, pero no lo están encontrado en absoluto.
PRIORIDADES La respuesta del PP es que aún no se ha hecho con el poder y que desconoce el estado de las cuentas autonómicas, por lo que le resulta imposible cuantificar qué cantidades destinará a la élite, si las hay. Monago ha repetido cuando se le ha preguntado que sus prioridades son el empleo, la sanidad, la educación y los servicios sociales y que únicamente cuando estuviesen cubiertos se plantearía la colaboración con la élite. Tampoco se sabe si en el deporte escolar y el practicado por discapacitados, bajo los formatos de los Judex y los Jedes, se mantendrá la misma filosofía.
Los clubs son remitidos a los ayuntamientos de sus respectivas ciudades --por lo general, del mismo signo político-- para que intenten resolver sus problemas porque ahora, desde la Junta de Extremadura, "es imposible hacerlo", aseguran. Pero las corporaciones constituidas a raíz de las elecciones del 22 de mayo tampoco están en su abrumadora mayoría para dispendios. La etapa más montañosa del deporte profesional extremeño se está haciendo muy cuesta arriba por la confluencia entre el vuelco electoral y la crisis económica.
DISTINTOS CASOS No ha habido un frente común para resolver la cuestión o al menos intentar presionar, y eso que hubo oportunidad para formarlo porque buena parte de las entidades subvencionadas se reunieron en Cáceres la semana pasada en la despedida del consejero de los Jóvenes y el Deporte todavía en funciones, Carlos Javier Rodríguez. Cada uno ha hecho la guerra por su cuenta y ha adoptado distintas formas de planificación dentro de la provisionalidad y las casi irresolubles dudas. Los hay que dan por hecho que saldrán en la misma competición, aunque arrastren fuertes deudas de la pasada campaña y desconozcan con qué presupuesto podrán contar. Es el caso del Escubal Badajoz (ex-Pines), que reconoce que se apuntará a la División de Honor Plata de balonmano. La situación ha pillado con fuerzas a un recién ascendido como el Comarca Llanos de Olivenza, que asegura haber reunido suficiente apoyo en su ayuntamiento y en empresas locales para afrontar la máxima categoría de fútbol femenino. También el Arroyo está realizando movimientos de cara a la Superliga 2 de voleibol femenino. La AD Extremadura está a punto de renunciar seguir en División de Plata de fútbol sala por falta de liquidez.
Otros han endurecido más su postura, como el Cáceres Creativa de baloncesto en LEB Oro, que, sin soluciones, cada día que pasa ve su futuro más pesimista, al igual que el Plasencia de LEB Plata. Ambos podrían terminar en la cuarta división, la EBA. Tampoco está claro el futuro del Mideba de basket en silla de ruedas. Mientras, el Femenino Cáceres de LF-2 sí está dando pasos hacia adelante.
