No llegaron a tiempo, como otras veces. La decisión de los estrategas del equipo Ferrari arruinó las extraordinarias manos demostradas por Fernando Alonso en la Q1 y en la Q2 del Gran Premio de Bélgica, que se disputa este fin de semana en el difícil y bello trazado de Spa-Francorchamps.

El bicampeón asturiano, que había conseguido los mejores tiempos en las dos tandas previas, no pudo completar la última vuelta, la decisiva, debido a que la 'Scuderia' le montó tarde el juego de ruedas para seco, mientras que tanto el británico Lewis Hamilton (Mercedes), que fue quien liderará la parrilla de este domingo, y el tricampeón Sebastian Vettel (Red Bull), segundo, pudieron aprovechar que la pista estaba ya casi seca tras la lluvia para colarse en primera fila.

A Alonso le cayó la bandera a cuadros cinco segundos después de que pudiese empezar su vuelta buena. El piloto español, que nada más llegar a Spa tuvo que decir que se llevaba muy bien con el presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, cree que, pese a todo, y dependiendo del tiempo (llovió sobre Spa), puede hacer este domingo una buena carrera "pues parece que tenemos buen ritmo". La última vez que arrancó desde la novena plaza, Alonso acabó en el podio y fue en Silverstone (Inglaterra).